POR RAMÓN MINYETY PINALES
AZUA.- La Asociación de Fabricantes de Conservas del Agro (AFCONAGRO) y pequeños productores, con el apoyo de la Secretaría de Agricultura, están cosechando y moliendo en la actualidad alrededor de 6 millones de quintales de tomate Industrial,  sembrados en más de 110 mil tareas, en las regiones Sur, Suroeste, Norte y Noroeste, con una inversión directa en el campo de 600 millones de pesos.

La información fue ofrecida por directivos de la AFCONAGRO y pequeños y medianos productores de  Azua y de la Línea Noroeste, quienes participaron en un día  de campo y  en un recorrido por el Proyecto YSURA, donde pudieron  comprobar la   gran producción de tomate existente.

La cosecha de tomate ha  generado un gran movimiento económico en las provincias productoras, ya que la zafra incorpora a miles de productores, obreros, comerciantes, transportistas otros sectores vinculados al proceso de siembra, producción, comercialización y procesamiento de ese importante rubro.

Durante la actividad los directivos de la AFCONAGRO, representantes de los productores y autoridades del Sector Agropecuario firmaron  un adendum, del acuerdo tripartito existente, que establece un aumento en el precio del quintal del tomate y un reajuste en el  costo de inversión, lo que redundará en beneficio de los productores de tomate Industrial.

En el día de campo estuvieron presentes el Ingeniero Luis Yanguela, Subsecretario de Estado de Producción de la Secretaría de Agricultura, en representación del titular de organismo, Ingeniero Amílcar Romero; Carlos Segura Fóster, Administrador General del Banco Agrícola:, los agro empresarios  Miguel Sánchez, de Transagrícola, (Linda),  en representación del Ingeniero Félix García, Presidente de AFCONAGRO,  Roberto Serrano, Presidente de Peravia Industrial (La Famosa), José Manuel Corripio y  Paulino Hernández, en representación del José L. Corripio E. , Presidente de e Victorina Agroindustrial. 

Asistieron además, los Ingenieros Radhamés Valenzuela, Director del Departamento Nacional de Producción de la Secretaria de Agricultura, Rubén Rojo, Administrador de Victorina Agroindustrial, Frank Díaz Thómas, Gerente Agrícola de Victorina, Luis Zoquier, de la Famosa y Santiago Echevarría, de Transagrícola, S.A. (Linda) y Porfirio Álvarez, en representación de la Junta Agro empresarial Dominicana y Augusto Villar, Gerente Técnico del Programa Manejo Integrado de Plagas, y los productores  Leonor Brito Tejeda, Secretario General de la Federación Provincial de Organizaciones Campesinas Azuanas Inc,. (FEPROCA) Ero Pérez, de la Federación de Productores FECAIMMAT, entre otras personalidades. 

Al pronunciar el discurso central del acto, el ingeniero  Luis Yanguela, destacó que el éxito que se está logrando en la presente cosecha de tomate, se debe fundamentalmente al esfuerzo que viene realizando el Presidente Leonel Fernández, de apoyar al hombre del campo y al trabajo incansable del Ingeniero Amílcar Romero, Secretario de Agricultura.

Dijo que esta cosecha se realiza con un éxito total y expresó  que la  AFCONAGRO constituye un ejemplo en nuestro país.            

Las palabras de bienvenida fueron pronunciadas por el Ingeniero Miguel Sánchez, en representación del empresario Félix García, Presidente de la AFCONAGRO, quien destacó que la presente cosecha cuenta con una inversión de 600  millones de pesos, en unas 110 mil tareas, sembradas en las regiones norte y sur, que benefician directamente al sector agroindustrial y a los productores, asegurando el abastecimiento del mercado nacional.

Expresó que las agroindustrias procesadoras de tomate industrial que participan en la promoción de ese cultivo son Transagrícola (Linda), Peravia Industrial  (La Famosa), Victorina Agroindustrial y Jajá Agroindustrial, pertenecientes a la Asociación de Fabricantes de Conservas del Agro (AFCONAGRO), quienes  garantizan la siembra, el financiamiento y el mercado seguro a más de 8 mil productores  a  seis mil  parceleros de reforma agraria y a dos mil pequeños agricultores, además de fuentes seguras de empleo de alrededor de 150 mil empleos fijos y una distribución de salarios a 550 mil personas de manera indirecta, incluidos los industriales fijos y móviles.

Señaló que los  directivos de AFCONAGRO se sienten  complacidos por el apoyo recibido del Superior Gobierno, a través del señor Secretario de Agricultura, ingeniero Amílcar Romero, del Director del INDRHI, ingeniero agrónomo Francisco T. Rodríguez, de Salvador Jiménez, (Chío), Carlos Segura Fóster, Administrador General del Banco Agrícolas y demás  autoridades regionales, de las instituciones y organismos de investigación del país, universidades, empresas de semillas, agroquímicos y fertilizantes, entre otras, cuya contribución ha sido en beneficio de los agricultores y de la paz social en el campo.

Expresó que los productores de las regiones norte y sur expresaron su satisfacción y se integran a la labor de siembra de tomate, gracias al soporte técnico y económico que reciben de parte de los agroindustriales. Esto significa que las agroindustrias llevan la esperanza a millares de familias en el campo dominicano.

Los técnicos de las principales agroindustrias tomateras aseguran que los inventarios y la cosecha programada aseguran el abastecimiento del mercado.

Aunque reconocieron que hubo un retraso de un mes en la siembra, debido a las lluvias que cayeron en octubre pasada, la situación fue superada gracias a la rápida intervención de los agroempresarios y las autoridades gubernamentales del sector agropecuario.

Otro aspecto importante en el éxito que se está logrando en la presente cosecha es la implementación de un riguroso paquete tecnológico, en el que la veda aplicada a 45 mil tareas de cultivos hospederos de la mosca blanca, es el componente principal porque ha podido contener la devastadora mosca blanca y el virus que la misma transmite.

Esa medida fitosanitaria, contenida en la Resolución No. 36 -2005, de la Secretaría de Agricultura, fue tomada por consenso, con la participación de todos los actores que intervienen en la producción, comercialización e industrialización del tomate industrial y demás cultivos incluidos en el programa veda para la protección de la producción nacional con el respaldo de cientos de agricultores y miles de obreros agrícolas que trabajan activamente en la siembra tomate industrial.

Impacto de la siembra del tomate

El subsector agroindustrial tiene un peso fundamental en la economía de las provincias donde se realiza esta actividad de tomate industrial, considerando que el mismo garantiza la siembra, el financiamiento y un mercado seguro. 

Con la inversión que realizan cada año las agroindustrias, en la siembra de tomate, maíz y otros rubros menores, se benefician amplios sectores de la población, como son más de  8 mil colonos, que directamente obtienen el financiamiento, la liquidación de sus cosechas, los dueños de equipos, los operadores de tractores, los propietarios de bombas de combustibles,  y las tiendas de repuestos.

Alrededor de un 45 por ciento, del total del costo de inversión, se  realiza en insumos  agrícolas, dinero que va a parar a las casas distribuidoras de esos productos, beneficiando a sus dueños, empleados y técnicos.

La mano de obra no especializada resulta muy beneficiada un 33 por ciento de la inversión corresponde a labores agrícolas de limpiezas de canales, riego, cultivos, aporque y aplicación de pesticidas.

La recolección del tomate  juega un papel importante, pues la misma involucra un 12 por ciento de la inversión en mano de obra.

Esta actividad es realizada por personas que residen en las áreas de producción del cultivo.

El  comercio en general resulta altamente beneficiado, ya que un alto porcentaje del dinero generado por mano de obra se destina para la adquisición de artículos para la alimentación, salud y  otras necesidades familiares.

Los dueños, los choferes y los ayudantes de los camiones, reciben prácticamente en su totalidad, el costo del transporte del tomate, desde la parcela hasta la fábrica.

También se benefician de la siembra del tomate industrial una gran cantidad de empleados fijos y nominales de las agroindustrias, especialmente en áreas como la ingeniería química, civil y agronómica, así como profesionales y técnicos en las áreas de economía, agronomía, metalmecánica, soldadura y otras.