Costos de pan afectan más a las pequeñas panaderías

Costos de pan afectan más a las pequeñas panaderías

El incremento de costos que se ha producido en la materia prima y en los insumos, iniciados en la pandemia y agravados por la invasión rusa a Ucrania, están castigando con mayor fuerza a las pequeñas panaderías que distribuyen los panes que consumen los barrios populares, que a los grandes fabricantes.

Aunque el Gobierno dispuso la entrega directa de un subsidio a la harina de trigo por 45 días, que luego extendió por 60 más, el incremento de costos de los demás insumos con que se produce el pan han continuado elevándose, lo que afecta en mayor medida a las pequeñas panaderías.

Esto así, porque las grandes empresas de ese rubro producen panes de molde, cuyos precios han continuando ajustando, lo que no ha ocurrido con los panes de agua y sobao que consumen los barrios populares, que han mantenido el precio de dos unidades por quince pesos.

El subsidio otorgado por el Gobierno a la harina ha sido positivo, porque el precio de esa materia prima se ha mantenido a partir de febrero, entre 2,200 y 2,250 pesos el quintal.

Esto, luego de haberse producido un incremento de alrededor de 400 pesos, pues el precio de antes de la crisis era de 1,850 pesos el quintal.

Pero, los precios de la grasa vegetal, la levadura y otros insumos, han seguido incrementándose, provocando no sólo una caída de los márgenes de beneficios de las pequeñas panaderías, sino, también obligándolas a financiar incrementos de capital para evitar cierre de operaciones.

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Situación

Ante esa situación, en el sector se debate plantear al Gobierno un apoyo directo a las pequeñas y medianas panaderías.

Entiende que ese apoyo puede ser a través de la eliminación del Itebis a las materias primas e insumos o en dinero, si las autoridades entienden que esa solución pudiera abrir alguna brecha por la que penetre la evasión.

Entre los dueños de panaderías se plantean los temores de que los costos se prolonguen en el tiempo, y que pudiera hacerse más perentorio ese apoyo.

Se sabe que Rusia y Ucrania son de los principales productores y exportadores de harina y de materia prima utilizadas en la producción de grasa vegetal, y que todavía no se ve el fin de la guerra en que están envueltos.

A eso se agrega que otros países productores de trigo y de insumos para el procesamiento de grasa vegetal han limitado sus exportadores.

Esto está provocando, dicen los propietarios de panaderías, que la demanda de esos productos alcance el nivel de la oferta, la reserva necesaria para evitar presiones alcistas en los precios.

Y esto preocupa al sector, porque ve que se agota su capacidad de respuesta.