El coronavirus causante del Covid-19 se ha cobrado la vida de más de 13 000 personas, tres de ellas en la República Dominicana, y ha infectado a más de 307 200 seres humanos en todo el mundo, según el balance global actualizado ayer domingo por la Universidad Johns Hopkins.
Lo que empezó como un problema para China se ha convertido en una situación de salud pública a nivel mundial, pues, aunque la mayoría de casos se han registrado en el país donde se originó la infección, la Organización Mundial de Salud (OMS) ha declarado la enfermedad como pandemia.
Ante el vertiginoso aumento de contagios, el Gobierno ha decretado estado de emergencia durante 15 días y ha adoptado un plan de contingencia para mitigar los efectos del Covid-19 que, a grandes rasgos, pasa por decretar el confinamiento en las casas salvo para acudir a algunos centros de trabajo y casos excepcionales, suspender las clases presenciales a todos los niveles, tomar el control de circulación decretando toque de queda y prohibir la circulación de transporte público masivo dentro y fuera de ciudad.
Esto se ha decido así porque en la actualidad la única manera de prevenir el contagio es el aislamiento social. Por el momento, el mejor remedio es la prevención.
Tras anunciar que el riesgo de expansión del Covid-19 ha pasado de nivel “alto” a “muy alto” en todo el mundo, equiparando así la situación global a la que vive China desde enero, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha dado varios consejos a la ciudadanía de todo el mundo para prevenir el contagio del virus y colaborar en el freno de su expansión.
Entre ellos no se incluye el uso de mascarillas, pero sí otro tipo de medidas muy similares a las de otras enfermedades infecciosas que les mencionamos a continuación.
Lavarse las manos frecuentemente, limpiar regularmente determinadas superficies, evitar los desplazamientos si se tiene fiebre o tos, toser o estornudar sobre la manga del brazo si no tiene pañuelos con qué cubrirse y, en caso de sentirse mal, quedarse en casa y llamar a un médico.
Si cae enfermo, quedarse en casa, separarse del resto de la familia, incluso al comer y dormir, y utilizar diferentes cubiertos y platos, llamar al médico si nota que le falta el aire, y en caso de vivir en una comunidad afectada, es comprensible sentir ansiedad.