Un estudio llevado a cabo en el 2018 por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) indicó que los accidentes de tránsito son la principal causa de muerte en los jóvenes latinoamericanos.
Anteriormente la Organización Mundial de la Salud (OMS) había revelado que la República Dominicana es el segundo país donde se registra la tasa más alta de muertes por accidentes de tránsito.
Datos como esos, sumado a su preocupación por la manera temeraria en la que muchas personas conducen en el país, motivaron a Yosi Madera a crear bajo la sombrilla de la Cámara Nacional de Transporte Terrestre (Cantt) la Unidad Permanente de Educación Vial (Upervial).
“La cifra es alarmante ya que el 70% son de jóvenes menores de 25 años son víctimas de accidentes de tránsito y con mayor frecuencia son conductores de motocicletas”, explica Madera.
Asimismo asegura que la escuela nace para formar a la ciudadanía en buenas prácticas viales, destaca que están diseñando un programa académico adaptable a diferentes públicos y prácticas: escolares, peatones, chóferes privados y públicos, así como ciclistas “la idea que la gente conozca sus derechos, pero que también sepa cuales son sus responsabilidades para transitar”, dice.
Básicamente según dice el rol de la escuela es educar en seguridad vial, con el fin de reducir accidentes de tránsito, “Upervial está regulada el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), que de hecho tiene una escala de formación también”, explica Madera.
Cómo funciona. Yosi Madera quien es además relacionista pública de formación, explica que esta escuela fue conformada como dependencia del programa de concientización del Cantt sobre la Ley 63-17 que incluye normas y reglamento para ofrecer programas educativos en materia de tránsito, transporte y seguridad vial.
“Si la gente se forma desde la escuela primaria por ejemplo, podremos no solo reducir los accidentes en las calles, sino también tener una mejor convivencia en las calles y evitar incluso confrontaciones: respetar las señales de transporte, ceder el paso, respetar los carriles, saber dónde pararse al cruzar la calle y respetar el espacio de cada persona”, explica.
Dijo también que al conocer sobre los posibles peligros que existen, “pero también sobre nuestros deberes y derechos como ciudadanos, podremos tomar precauciones que nos lleven a la generación de hábitos y actitudes que disminuyan las alarmantes cifras de accidentes de tránsito”.