Crear una cultura meteorológica

Crear una cultura meteorológica

Nos alegramos que la oficina de Meteorología  con la llegada de Danielle haya actuado rápido y responsablemente, protegiendo la vida de las posibles víctimas, a tiempo. La actuación del COE fue muy responsable con niveles de coordinación casi jamás alcanzados en el país: poblaciones recogidas a tiempo, protegidas hasta que el peligro pasó. Sin embargo, frente al ciclón Earl se ha podido notar una descoordinación entre la oficina de meteorología y la población.

El ciclón, según meteorología, nunca fue una amenaza y nos parece que esa seguridad no procedía. El ciclón pasó cerca y la población no estuvo en alerta. Demasiado seguridad? O intención de no alarmar demasiado otra vez?

Creemos que para evitar esa situación,  la oficina de meteorología debe crear una cultura meteorológica, especialmente en época ciclónica; una cultura que demuestre interés y prevención: eso significa acostumbrar las poblaciones a seguir el desarrollo de los fenómenos atmosféricos, desde su formación, al oeste de África.

¿Cómo? Que la prensa publique fotos satelitales y acostumbre a los lectores a seguir la progresión del fenómeno diariamente. Otra recomendación que hacemos es que después de leer el parte meteorológico de la oficina de Miami, prácticamente ininteligible para el pueblo por ser demasiado técnico, proceda a una descodificación-relectura, utilizando las herramientas de la comunicación en educación popular, que no lo es solamente por el sujeto a quien va dirigido el mensaje, sino por la intencionalidad social con la que se hace.La intencionalidad social es  hacer entendible el mensaje científico a la población para que pueda, después, socializar y comprender lo que  va a pasar y poder así actuar y ser co-participe de su protección con sus organizaciones comunitarias.

 En educación popular  existe una estrecha relación entre educación y organización, es decir que una buena comprensión del mensaje de meteorología  debe permitir a las organizaciones comunitarias retroalimentarse para prevenir, actuar, organizarse y evitar ser víctimas inconscientes de los fenómenos naturales y  sus impactos. Esperamos que dentro de algunos años, los valores de la técnica de comunicación, con la organización social hayan creado hombres  y mujeres activos y no pasivos, hombres y mujeres que sepan actuar e involucrarse mejor en su defensa frente a la Naturaleza, con o sin la Defensa Civil.

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