La situación financiero del sector eléctrico se está complicando porque en adición a la alta deuda del gobierno, también hay una creciente entre los agentes del sector privado.

De una deuda de 481.2 millones de dólares al 31 de enero pasado, el gobierno, a través de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) adeuda 173.7 millones de dólares, mientras que el resto es deuda entre los agentes privados y de éstos con la CDEEE.

La CDEEE tiene cuentas por cobrar ascendentes a 40.3 millones de dólares, lo cual coloca su deuda neta en un nivel de 133.4 millones de dólares.

Las tres distribuidoras tienen una deuda con los demás agentes privados y la CDEEE que alcanza los 235 millones de dólares.

De las distribuidoras, la que tiene la mayor deuda es EdeEste, la cual debe a los demás agentes privados y a la CDEEE la suma de 118 millones de dólares.

Las deudas por cobrar de EdeEste ascienden a 11.3 millones de dólares, por lo cual su deuda neta a más de 106 millones de dólares.

Edenorte debe 78.3 millones de dólares y Edesur la suma de 39.1 millones de dólares. No tienen deudas por cobrar a otros agentes del mercado.

Otros deudores importantes del sector son la generadora Egehaina, cuya deuda es de 26.8 millones de dólares; DPP, con una deuda de 20.6 millones de dólares, y EgeItabo, cuya deuda es de 16.8 millones de dólares.

Las cuentas cobrar de EgeHaina suman 84.9 millones de dólares; las de EgeItabo ascienden a 62.8 millones de dólares; las de DPP a 57.9 millones de dólares; las de Smith and Enron a 54.8 millones; las de CEPP a 41.6 millones de dólares; las de Seaboard a 30 millones; las de Metaldom a 28.6 millones; las de CESPM a 21 millones; las de AES Andrés a 19.3 millones; las de Unión Fenosa a 12.7 millones, y las de Monte Río a 10.6 millones.