Texas. De EFE.- Más consumidores estadounidenses presentan retrasos en el pago de sus créditos al tiempo que han incrementado el empleo de préstamos, dos indicadores que apuntan a la necesidad de tomar medidas para poner las deudas bajo control.

La deuda total de los consumidores en créditos compuestos, que son principalmente los de tarjetas de crédito, creció hasta alcanzar un récord de 872,600 millones de dólares en noviembre, según datos dados a conocer esta semana por la Reserva Federal de EEUU.

La cifra representa un aumento de 11.9 por ciento de la tasa anual de endeudamiento de los consumidores, quienes adquirieron más de 8,000 millones de dólares en créditos compuestos en noviembre respecto sólo al mes previo.

Esta no es una buena noticia para la salud de las finanzas personales, sobre todo si se toma en cuenta que al cierre del tercer trimestre del pasado año los consumidores mostraron mayor dificultad para cumplir con el pago de sus deudas.

Así lo demuestran los resultados del Boletín de Morosidad del Crédito de los Consumidores dados a conocer esta semana por la Asociación Nacional de Banqueros Americanos (ABA). Los datos más recientes, del tercer trimestre de 2006, indican que el retraso en pagos de deudas de los consumidores creció en 4,57 por ciento, justo antes de los anticipados gastos navideños del último trimestre pasado.

“Los puntos de presión que están exprimiendo los presupuestos de los consumidores se mantienen, haciendo difícil para algunas personas poder cumplir con sus obligaciones de deudas”, indica el boletín.

Probablemente, tras los festejos navideños, el cúmulo de deudas en tarjetas de crédito sea ahora todavía mayor para los consumidores, por tratarse del período del año de mayor consumo en el país.

Existen varios signos claros para el consumidor de que sus finanzas necesitan un ajuste inmediato, para evitar caer en deudas impagables con la consecuente pérdida de crédito y afectación de su historial crediticio. Algunos de ellos son no tener suficiente efectivo para pagar gastos fijos y al menos las mensualidades mínimas en deudas contraídas, pagar tarde frecuentemente, y crecimiento de balances de deuda en lugar de su disminución.

La primera medida para remediar la situación de deudas es detener por completo cualquier gasto superfluo, y reducir gastos en general dondequiera que sea posible, como entretenimiento, comidas fuera, y compras accesorias que pueden evitarse o posponerse.

La idea en este sentido es “encontrar” o “extraer” dinero de conceptos de gastos para destinarlos a la reducción de las deudas, y tratar de pagar lo más posible a cada tarjeta, en lugar de limitarse a las mensualidades mínimas exigidas. Es importante eliminar prioritariamente el balance de las tarjetas que tienen las mayores tasas de interés, porque son aquellas donde la deuda se incrementa más rápidamente.