DAMASCO.  AFP.  El ministro francés de Relaciones Exteriores, Alain Juppé, amenazó ayer, en caso de fracaso del plan de paz del emisario Kofi Annan, con presionar para que la ONU autorice el uso de la fuerza en Siria, donde continúa la represión pese a la presencia de observadores.

Desde su entrada en vigor el 12 de abril, la tregua contemplada en el plan de Annan ha sido violada todos los días.  

Este miércoles, 27 civiles y tres soldados murieron en todo el país, según el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).  

Doce civiles murieron cuando las fuerzas del régimen bombardearon el barrio de Masaa al Tayaran en Hama (centro), según el Observatorio.

También hubo muertos en la provincia de Idleb (noroeste), en Rastan (centro), Deir Ezzor (este), en la provincia de Damasco, y en la de Deraa (sur), apuntó el OSDH.

En esta última murieron asimismo tres soldados en combates con desertores.   La violencia continúa pese a la presencia de un grupo de 15 observadores de la ONU en el país, encargados de vigilar el cumplimiento del alto el fuego. Dos de ellos están basados en Hama.

La clave

Despliegue se aceptó

Francia, nación dirigida por Nicolas Sarkozy, se pronunció en favor de desplegar «en quince días» a 300 observadores de la ONU en Siria, previstos en la resolución 2043 del Consejo de Seguridad de la ONU adoptada el 21 de abril.