El desempeño económico del país este año ha sido bastante saludable, tanto por el alto porcentaje de crecimiento del PIB previsto para el cierre del período, como por la naturaleza de un buen número de factores determinantes de ese comportamiento. El ministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta, informó hace poco que se espera que la economía cierre el 2014 con crecimiento cercano al 7% y que las proyecciones hacen prever que 2015 será mejor que el año actual.

A pesar de cierta incertidumbre en el entorno regional, el crecimiento de la economía dominicana tiene entre sus principales soportes los efectos positivos de políticas públicas que han catapultado a las pyme y a los pequeños y medianos productores del campo, mediante la facilitación del acceso al crédito y las compras y contrataciones estatales, la construcción de escuelas, el crecimiento del turismo y la inversión extranjera, así como el empuje de las zonas francas y las exportaciones.

Esta dinámica, además, es favorecida por factores coyunturales como el desplome de los precios del petróleo y sus derivados, que supondrá para el Estado un ahorro considerable que puede ser usado para continuar financiando producción. En términos económicos, el 2014 ha sido un buen año y hay factores abundantes que justifican que esperemos con optimismo el 2015.

UNA PROPUESTA DE SOLUCIÓN VIAL 

La alta peligrosidad de la Autopista de las Américas, que tiene tramos críticos en los que son frecuentes los accidentes fatales, requiere una intervención oficial basada en un plan que permita resolver los problemas de circulación de esa importante vía. Esa premisa inclina nuestra atención hacia el anteproyecto de solución propuesto por el arquitecto Jesús Musa, que contempla pasos a desnivel y otras opciones para regular el tránsito en tramos peligrosos como el que media entre la estación de peaje y la entrada de Boca Chica.

El anteproyecto “Diseño de la infraestructura vial de la Autopista de las Américas” es un aporte que el Gobierno debería ponderar como alternativa para atenuar la peligrosidad en los tramos críticos de Las Américas y mejorar la circulación hacia y desde la región Este del país.