El economista Fernando Álvarez Bogaert advirtió que ante la crisis financiera internacional, ya la economía dominicana no resiste más ajustes vía la política monetaria, y que ahora se impone un gran ajuste en el gasto público, para hacer sostenible la estabilidad macroeconómica.
Además, Álvarez Bogaert advirtió que para financiar el alto déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos el país va a requerir de un importante flujo de capitales líquidos y que para conseguirlo se hace necesario que se coloque bajo la sombrilla del Fondo Monetario Internacional (FMI), por ser urgente la firma de un acuerdo con ese organismo.
Dijo que más que rendimiento, los inversionistas están buscando en estos momentos seguridad, para protegerse de la crisis financiera internacional, lo cual explica la brusca caída que han experimentado los rendimientos de los bonos del Tesoro de los Estados Unidos, ya que ha habido una masiva emigración de los inversionistas hacia instrumentos seguros.
Resaltó que el plan de rescate anunciado por la administración Bush ha logrado que en los últimos dos días las pérdidas de las últimas dos semanas en Wall Street se hayan reducido a sólo 1.2 por ciento, pero advirtió que a pesar de eso, la crisis va a tener un fuerte impacto sobre la economía mundial, que podría crecer este año en 1,5 por ciento y el año próximo en menos de 1 por ciento.
Explicó que ese será un crecimiento recesionario, porque al ser tan reducido no evitaría que las grandes corporaciones dispongan de significativos despidos de personal.
Dijo que los sectores del país que serían más afectados por la caída en el crecimiento económico mundial, y particularmente de los Estados Unidos, país con el cual la República Dominicana mantiene el 80 por ciento de su intercambio comercial, serían las remesas, zonas francas y el turismo.
Dijo que en el caso del turismo está la agravante de que las líneas aéreas internacionales están incurriendo en grandes pérdidas, lo cual las ha obligado a reducir cantidad y la frecuencia de vuelos a la República Dominicana y a aumentar las tarifas de los servicios que ofertan.
En cuanto al plan de rescate anunciado por los Estados Unidos, dijo que no tiene precedentes desde el año 1932, y que virtualmente ha eliminó el proceso de desregulación que se inició a finales de los años 80.
Explicó que el origen de la crisis financiera actual en los Estados Unidos está en la eliminación de la ley Glass Stegil, que funciónó esplendidamente desde el 1933 al 1999. Dijo que esa ley fue derogada por el Congreso de los Estados Unidos en la administración del presidente Bill Clinton quien, aunque en cierta medida no estaba de acuerdo con ella, no la vetó.
La frase
Fernando Álvarez B.
En el año 2000, Ed Gralen, vice-presidente a cargo de la regulación en la Reserva Federal, propuso regular a las asociaciones hipotecarias, y Alan Greenspan lo impidió con el apoyo de los republicanos.