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POR ROSA ALCANTARA
El candidato presidencial de La Cuarta Vía, Eduardo Estrella, consideró que el Presidente Leonel Fernández caería en una labor de encubrimiento a la corrupción si no pone a disposición de la justicia a los funcionarios de su gobierno involucrados en el escándalo del préstamo de US$130 millones con la empresa extranjera Sun Land.
El aspirante a la primera magistratura del Estado sostuvo que el gobierno admitió precisamente esta semana el carácter doloso de la transacción cuando informa al país haber rescindido el referido préstamo, alegando incumplimiento por parte de la empresa extranjera. A confesión de parte, relevo de pruebas.
Dijo que la acción anunciada por el gobierno no resuelve el escándalo, lo cual queda incluso corroborado por la afirmación del presidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Subero Isa, en el sentido de que el caso de la Sun Land Corporation continúa abierto en los tribunales sin importar que el gobierno haya rescindido el préstamo por las razones que fuere.
Consideró inadmisible que todavía a estas alturas el presidente Fernández no haya puesto ningún funcionario a disposición de la justicia para que responda por esta acción que ha perjudicado la imagen de su gobierno ante la opinión pública nacional e internacional, a tal punto que se tengan que ofrecer explicaciones al Fondo Monetario Internacional y otros organismos crediticios sobre las circunstancias en que tales acciones ocurrieron.
Estrella emitió sus consideraciones en Puerto Plata, donde estuvo acompañado del presidente del Partido Revolucionario Social Demócrata, Hatuey De Camps; del presidente del Partido Nacional de los Veteranos y Civiles, Juan Cohén;, el presidente del Partido Humanista Dominicano, Eléxido Paula; el presidente del Frente Nacional Opositor, Felvio Rodríguez, y de dirigentes del Movimiento Dominicanos por el Cambio, entre ellos, la jefa de campaña, Sergia Elena de Séliman, el diputado Papito Martínez, Clara Brugal y Vinicio Méndez, así como del presidente del PRSD en Puerto Plata, el empresario Otto Gómez.
Calificó de muy grave que un Presidente de la República coloque su amistad y su aprecio personal por un individuo por encima de los intereses de la nación como está ocurriendo en este caso, máxime cuando la población todavía no se olvida del perdón que le otorgó a sus amigos involucrados en el escándalo PEME, ocurrido durante su primer período de gobierno 96-2000.
Dijo que la única acción creíble que puede encaminar el presidente Fernández es el sometimiento inmediato de los funcionarios involucrados por ante los tribunales, porque de lo contrario estaría cayendo en una labor de encubrimiento que lo hace aparecer como el responsable primario, lo que constituiría una traición a la confianza que en su persona ha depositado toda la sociedad dominicana.
