El fuerte aumento de casos de coronavirus en Estados Unidos incrementa la presión sobre el presidente, Donald Trump, para que admita su derrota electoral e inicie una transición que permita al presidente electo, Joe Biden, coordinar conjuntamente un plan contra la pandemia, que sigue aumentando a niveles récord y está comenzando a ocasionar una fuerte presión en hospitales de todo el país.
El director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID), Anthony Fauci, reiteró en una entrevista publicada ayer por el diario The New York Times la importancia de coordinar una transición entre administraciones especialmente en un momento tan crítico como el que vive actualmente el país, que ha sumado un millón de casos en sólo una semana.
“He pasado por cinco transiciones y les puedo decir que las transiciones son extremadamente importantes para la continuidad sin fricciones de lo que sea que se esté haciendo.
Necesitamos una transición a un equipo que lo haga de manera similar a como lo estamos haciendo”, apuntó el epidemiólogo más importante en la lucha contra la pandemia de EE.UU. y al que Trump y sus acólitos han criticado. Biden, que sigue sin recibir la aprobación para que su equipo trabaje de cerca con las agencias que deberá supervisar desde el 20 de enero, día de la toma de posesión de la nueva administración, se reunió con expertos en materia de defensa.
Pfizer agiliza su vacuna
La farmacéutica estadounidense Pfizer se está preparando para solicitar de forma inminente la aprobación de emergencia de su vacuna contra la covid-19, que ya superó los requisitos de seguridad fijados para su fase 3 de ensayos, según aseguró este martes el consejero delegado de la empresa, Albert Bourla.
Bourla se pronunció así en un foro organizado por The New York Times y en otro del medio especializado en salud STAT News, después de que su empresa y su socio BioNTech anunciasen el 9 de noviembre que la vacuna tiene una efectividad superior al 90 %.
“Estamos muy cerca de solicitar la autorización de emergencia”, dijo el principal responsable de la farmacéutica, que no quiso dar una fecha precisa para ese esperado paso. Según Bourla, Pfizer ya ha recabado los datos de seguridad que requieren las autoridades sanitarias, que exigen a los fabricantes el seguimiento durante dos meses de al menos la mitad de las personas que recibieron la vacuna durante los ensayos de fase 3.
La vacuna china.
Por otro lado, la formulación de una candidata china a vacuna contra la covid-19 parece “segura” e induce una respuesta de anticuerpos en voluntarios sanos de entre 18 y 59 años, según los resultados preliminares de un estudio publicado este martes en la revista The Lancet.