Dos exgobernadores del Banco Central consideraron ayer que el uso de crédito interno por parte del Gobierno  podría afectar los préstamos para el sector privado.

Guillermo Caram y el otro exgobernador del Banco Central, quien  pidió que se omitiera su nombre, señalaron los aspectos favorables y desfavorables de ese financiamiento.

Según Caram, cuando se dirige el crédito interno hacia el Estado se disminuye la cantidad de recursos disponibles para lo que debería ser la prioridad en este momento: fomentar las actividades productivas primarias (agricultura e industria).

Consideró que  la demanda insaciable del Estado de recursos para cubrir su déficit fiscal está elevando la tasa de interés.

“Esa política del Gobierno no la veo saludable, creo que es  insana y que lo que debería propiciarse es cortar el mal de raíz, eliminando los déficits en el sector público”, dijo.

Por otro lado, el otro exgobernador del Banco Central que pidió no se revelara su nombre dijo que la ventaja del crédito interno es que no aumenta la deuda externa, que hay que pagarla en moneda dura.

“La parte positiva del crédito interno es que el pago de los intereses se queda en el país y no sale al extranjero, o sea,  que se queda en la economía”, dijo.

Una de las desventajas del crédito interno es que se tengan que ofrecer tasas de interés por encima de las que prevalecen en los mercados internacionales, precisó. Citó que uno de los sus principales inconvenientes es que el Gobierno le coja el gusto a ese mecanismo de financiar el déficit fiscal que arrastra.

Zoom

Ningún pro

1.  Guillermo Caram no ve ninguna ventaja en que el Gobierno haga  uso del crédito interno.

2. Dijo que el Estado debe cortar de raíz ese financiamiento a través de la eliminación del déficit fiscal.

3. El otro exgobernador del Banco Central dijo  que lo  importante es que el crédito interno no se utilice de manera excesiva por parte del Gobierno para financiar el déficit fiscal.