POR KAREN GUREGIAN
Del Boston Herald
Es tiempo de ver la realidad como tal. Si su cuadríceps derecho tiene problemas, como admitió David Ortiz el martes, entonces no hay sentido de que haga el viaje al Juego de Estrellas de California. Claro, ya se retiró de la Competencia de Jonrones, pero eso no es suficiente. Como Curt Schilling, es tiempo de sentarse.

Es por su propio bien, y últimamente, por el bien del equipo.

Naturalmente, Ortiz no quiere defraudar a sus fanáticos que lo votaron para el Juego de Estrellas comp primera base.

El designado de los Medias Rojas indicó eso mismo antes de la victoria sobre los Devil Rays de Tampa Bay, pero sonó como un hombre que no tiene más opciones.

“Tengo tantas cosas qué hacer, tengo que ir. Hay muchas cosas. Desearía poder descansar”, dijo Ortiz cuando le preguntaron sobre la posibilidad de que dejara de lado el Juego de Estrellas.

“Respeto mucho a los fanáticos. Para mi, decir que necesito tiempo libre, no puedo. Me encantaría, pero le tengo mucho respeto a los fanáticos. Ni siquiera soy un inicialista y votaron por mi. Recibí dos millones de votos. Esas son personas que me quieren ver allí”.

Millones de fanáticos de los Medias Rojas también quieren ver a Ortiz sano, y más parecido a su propia persona en el plato. Quieren ver al tipo que es el bateador más temido en el plato cuando el juego está en línea, no el tipo de quien recientemente se dijo que era el Gran Elevado.

Ortiz, cuyos números de poder han bajado en los últimos días, dijo que estaba “contra las cuerdas. No se puede ir a ningún sitio. Podría, pero no se puede”.

 Suena como si estuviera agonizando por aparecer en su cuarto Juego de Estrellas seguido. El sabe lo que es mejor para él, pero no escogerá esa ruta porque no quiere decepcionar a las masas fieles.

Todo el mundo primero, ya sea para caridad u otras cosas. Ese es el Big Papi.

Ortiz, quien se fue de 4-0 el martes y se está viendo más frustrado en cada turno al bate, no debe sentirse de esa forma en este momento.

Si alguien merece un descanso, ese es él. El siempre está presente y se puede confiar en él.

Y contrario a otras estrellas, que se inventan lesiones y enfermedades para escaparse del Juego de Estrellas, el Big Papi tiene una excusa valida para descansar con miras a la segunda mitad.

El ha estado plagado con este problema del cuadriceps todo el año y ciertamente las cosas no mejoran.

Por eso podemos decir que necesita un descanso y la gente debería entenderlo de esa manera sin querer juzgarlo injustamente.