Técnicos de la Secretaría de Medio Ambiente, de la Academia de Ciencias y de la Universidad Autónoma de Santo Domingo  iniciaron ayer las investigaciones para establecer  las causas de la muerte de miles de peces en la playa Las Garitas, del municipio de Sánchez, en Samaná. Mientras, Pedro Carreras Aguilera,  gerente regional de Recursos Forestales, atribuyó  a una mala práctica de los pescadores la muerte de  peces en esa playa, y descartó el envenenamiento de las aguas..

Idalia Acevedo, subsecretaria de Recursos Costeros y Marinos de la Secretaría de Medio Ambiente, informó que para hoy habrá un informe preliminiar, aunque aclaró que el análisis de calidad  de agua para establecer la posible presencia de  elementos extraños tardará algunos días.

Informó que desde que recibieron los reportes de la situación se envió un equipo multidisciplinario a la zona, integrado por el director de Pesca, biólogos, especialistas en peces y otros.

Explicó que la muerte de peces puede deberse a varios factores, como uso inadecuado de redes, derramamiento de alguna sustancia contaminante, ya sea de manera intencional o accidental, entre otras.

Apuntó que algunos pescadores utilizan redes inadecuadas, que son ilegales, y a veces capturan peces pequeños que luego se mueren y los tiran, pero hay que establecer las variedades de peces que han muerto, tamaño, ya que eso dice mucho al experticio científico.

Señaló que la zona de Sánchez y toda  la Bahía de Samaná es de gran uso pesquero y que próximo a Las Garitas hay un  área de desembarco de barcos pesqueros.

Recordó que en el 1999 en Samaná hubo una gran mortandad de peces cuando se construía el malecón, ya que debido al movimiento de tierra muchos sedimentos fueron arrojados al agua que provocaron muerte de miles de especies.

UASD

La bióloga Felicita Heredia encabeza el equipo técnico de la UASD y la Academia de Ciencias que acudió a Sánchez a indagar sobre la situación. Luis Carvajal vocero de ambas entidades, dijo que se manejan varias hipótesis sobre la causa de la muerte, pero hay que hacer las comprobaciones de lugar y mientras tanto no será emitida ninguna declaración.

Carvajal felicitó la actitud del síndico de Sánchez Angel de Jesús Calcaño, quien denunció la muerte de los peces y confió en que las  autoridades de Medio Ambiente actúen prontamente en cuanto al problema.

DESCARTA ENVENENAMIENTO

El gerente regional de Recursos Forestales, con asiento en San Francisco de Macorís, Pedro Carreras Aguilera, atribuyó a mala práctica de los pescadores la muerte de  peces y  descartó que la causa haya sido envenenamiento de las aguas.

Calificó de exageradas y alarmantes las declaraciones del síndico Calcaño.

Carreras Aguilera dijo que los pescadores de la zona se dan a la tarea de utilizar tramayos, chinchorros y “licuadoras”, que son equipos que provocan  un gran arrastre de peces.

  Añadió que todos los peces pequeños, que no son comercialmente útiles, los lanzan luego a la playa, que es lo que entiende ha ocurrido en esta oportunidad.

“Esa es una práctica muy rústica y  en ella  mueren  los pecesitos más pequeños, porque no es una pesca selectiva. Entonces ellos se llevan los grandes y los pequeños los tiran al mar. Y lo que pudimos ver es que son algunos peces que están muertos”, explicó.

 Carreras Aguilera informó que ayer se comunicó con el procurador adjunto de Medio Ambiente, y que posteriormente se comunicará con los directores de los departamentos de Caza y  Pesca y Vida Silvestre, a fin de que juntos busquen una solución al problema.

ES ILEGAL

Por su lado, el señor Casimiro Acosta, residente en la zona de la playa de Las Garitas, dijo que es frecuente la aparición de peces muertos en el área, debido a que los pescadores utilizan esos equipos de arrastre.

Indicó que en horas de la noche, principalmente, los pescadores lanzan la “licuadora” en esa zona, y todos los pececitos pequeños los tiran a la playa.

 Acosta dijo que esa práctica se produce desde hace varios meses en Las Garitas.