Creen que Sosa no vuelve con Cubs

Creen que Sosa no vuelve con Cubs

POR ENRIQUE ROJAS
De ESPNDeportes

Aprovechando el escenario de su convención anual, los Cachorros de Chicago dieron a entender al mundo del béisbol que se estaban preparando para reparar las dañadas relaciones con su estelar jardinero Sammy Sosa en lugar de seguir buscando una nueva casa al jonronero.

El gerente general Jim Hendrick y el manager Dusty Baker crearon esa percepción en la prensa y los aficionados de Chicago que acudieron al calentamiento invernal que anualmente realiza el club antes de empacar sus utensilios para viajar a los campos de entrenamientos.

Pero que Sammy Sosa aparezca en la alineación de los Cachorros el día inaugural de la próxima temporada tiene tantas probabilidades como tienen Pittsburg o Kansas City de ganar la Serie Mundial. Muy pocas, por no decir ninguna, realmente.

Todas las cosas que han pasado, y se han dicho, entre los Cachorros y Sosa desde el último día de la temporada han deteriorado tanto la relación que un divorcio parece inminente. Revisemos los acontecimientos.

Sosa se marchó temprano el último día de la temporada mientras sus compañeros enfrentaban a los Bravos de Atlanta.

Mientras Sosa argumentaba que la gerencia sabía que no jugaría ese día y que se había marchado en la séptima entrada, el club desmintió ambas cosas, incluso presentando el video de las cámaras de vigilancia del parqueo del Wrigley Field, que mostraban la hora exacta en que el jugador abandonó la instalación. Los Cachorros no solamente culpaban a Sosa por no quedarse en el estadio, sino que también le llamaron mentiroso públicamente.

Luego multaron a Sosa con su paga del tres de octubre (87,500 dólares), movimiento que fue apelado por los agentes del pelotero.

Cuando llegó a Santo Domingo, Sosa criticó a Baker por haberlo bajado al sexto turno en la alineación durante un tramo de la temporada.

La semana pasada, Sosa dijo a este columnista que no había hablado con Baker desde que acabó la temporada pasada y que tampoco planeaba hacerlo.

En la apertura de la convención de aficionados de los Cachorros, los medios de prensa anunciaron que Hendrick y Baker se reunirían con Sosa en la casa que tiene el jugador en Miami antes de que comenzaran los entrenamientos.

Sin embargo, durante una conferencia de prensa el domingo, Hendrick desmintió la reunión y dijo que estaba esperando que Sosa lo llamara a él.

El asunto es sencillo: Ni Sosa ni los Cachorros están viendo el largo episodio invernal como simple negocio, sino más bien como un entuerto personal.

Los Cachorros cometieron un error al tratar de destruir públicamente la imagen de Sosa para suavizar la reacción del público cuando intentaran cambiar al jugador más popular en la historia del club.

Cuando no encontraron un equipo que cargara con la pesada carga financiera del contrato del jonronero dominicano, entonces tratan de aplicar la gastada y desabrida política de «borrón y cuenta nueva». En la vida hay daños que son irreparables y las relaciones entre Sosa y los Cachorros ha llegado a ese punto.

Vito Corleone, el célebre personaje de la exitosa novela «El Padrino», de Mario Puzo, nos enseñó que «nada es personal en asuntos de negocios», pero al mismo tiempo enseñó a su hijo Michael, su heredero como cabecilla de la familia más importante del hampa de New York, que «todo es personal, incluso los negocios».

Aunque públicamente Sosa ha mantenido el discurso de que sigue siendo un cachorro y está preparado mentalmente para ir a los entrenamientos en Mesa, Arizona, en privado ha manifestado que no se imagina entrenando en el campamento de Chicago.

Ahora que los Mets de New York prácticamente han salido de la carrera por firmar al inicialista Carlos Delgado, nuevamente se abre la posibilidad de que Sosa sea enviado a Shea Stadium. Pero si Sosa no es cambiado a ningún equipo, podemos prepararnos para presenciar la situación más molestosa y ardiente entre un equipo y su principal estrella.

«Todo hombre tiene un destino», era una de las frases preferidas de Vito Corleone. El destino de Sosa parece alejarse de Chicago.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas