Los economistas Gabriela Fernández Leroux y Ernesto Selman abogaron por la aprobación en el país de una ley de responsabilidad fiscal como primer paso para ordenar las finanzas públicas. 

En un trabajo publicado  por el Centro Regional de Estratégicas Económicas Sostenibles (CREES), plantearon  que los altos déficit en el sector público ponen en evidencia la necesidad de esa ley.

Recordaron que el gobierno reconoció la existencia de un déficit sin precedentes para este año, que se estima alcanza los RD$155,946 millones, y que representa una desviación de RD$133,502 millones sobre lo aprobado por la Ley General de Presupuesto 2012.

Entre los aspectos que debe contener la ley propuesta citaron   la descripción de una estrategia presupuestaria anual y de mediano plazo que sirva para lograr los objetivos fiscales; la especificación de la trayectoria de mediano plazo de los ingresos fiscales y gasto público, y la publicación regular de informes sobre el avance en la realización de los objetivos fiscales.

Plantean que una ley de responsabilidad fiscal puede incluir otros componentes que ayuden a transparentar las intenciones de política fiscal del gobierno y sus resultados, como cuantificación de las exenciones tributarias y las distorsiones que introducen; descripción de riesgos fiscales; cuantificación de los impactos de nuevas políticas tributarias y de gasto que el gobierno busque implementar, y análisis de sensibilidad de la sostenibilidad fiscal frente a distintos escenarios.

Como base para su propuesta, los economistas usaron como referencia la Ley de Responsabilidad Fiscal de Nueva Zelanda, que fue uno de los primeros países en adoptar este tipo de ley y es uno de los casos más reconocidos  su éxito.

Expresaron que la ley dominicana debería contemplar reducir la deuda total a niveles prudentes, bajo los parámetros de intereses como porcentaje de los ingresos fiscales y servicio de la deuda como porcentaje de los ingresos fiscales.

Esto busca, señalan, el objetivo de proveer un amortiguamiento contra imprevistos que puedan afectar negativamente el nivel de deuda total en el futuro.

Hasta lograr esto, el gobierno debe asegurar que sus gastos operativos se mantengan por debajo de sus ingresos operativos totales. Plantean que el gobierno debe ajustar la estructura del gasto público y no buscar incrementar los ingresos con aumentos de impuestos.