El cansancio y la insatisfacción de los ciudadanos con las fórmulas de la política democrática tradicional y la irrupción de las redes sociales de internet, y sus inmensas posibilidades de interacción social, fueron ponderadas como factores claves en resultados tan inesperados como los expresados en los plebiscitos del sí al Brexit, el no al acuerdo de paz en Colombia, el triunfo de Donald Trump y la impactante y exitosa Marcha Verde que se realiza en el país por el fin de la impunidad y la corrupción.
Los planteamientos fueron expresados en el seminario taller Comunicación, Política y Democracia, presentado por el Centro de Estudios de Políticas Públicas (CEP), que auspicia el dirigente político y economista Luis Abinader, con la participación de destacados especialistas nacionales y extranjeros, y centenares de intelectuales, profesionales, estudiantes y dirigentes políticos.
El sociólogo Wilfredo Lozano abrió informando que la convocatoria del CEP se originó en los grandes desafíos que imponen a la actividad política en democracias las nuevas tecnologías de la revolución informática.
Adelantó que en su nueva fase organizativa el CEP tiene en programación estudiar los principales temas que debe conocer y asumir la construcción de una democracia sostenible, tanto en los aspectos sociales como económicos y políticos.
En las palabras inaugurales de la actividad, Abinader resaltó que el impacto de las Tecnologías de la Información y la Comunicación han cambiado la relación entre estado, políticos y ciudadanos, resultando ese impacto más profundo, complejo e influyente de lo que se pudiera advertir a simple vista.
Democratizar la política. Ese paradigmático cambio de relación política-ciudadanos que facilitan estas revolucionarias tecnologías en las comunicaciones, a través de la transmisión instantánea de imágenes y data, especificó Abinader, ha ensanchado el horizonte civilizatorio de la humanidad, y deben ser aprovechadas por las sociedades para democratizar la política y promover el bien común, asociándolas a valores y causas justas.
Si bien es cierto que las nuevas tecnologías de la información han abierto formas inéditas de participación y movilización ciudadanas, transformando positivamente la naturaleza misma del espacio, también es cierto que esas mismas tecnologías en manos de un liderazgo clientelar y populista activan nuevas modalidades de control político, de desmovilización ciudadana, de clientilización de las relaciones políticas y ruptura del lazo activo entre Estado y ciudadanía.
A Luis Alberto Quevedo, director de la sede argentina de FLACSO correspondió la conferencia magistral “La democracia política en la sociedad de la información: problemas y desafíos del presente”.
Resaltó que el cambio acaecido tanto en la comunicación como en la representación política, y en las formas en que el ciudadano construye hoy sus vínculos con lo público, tiene que ver con la crisis de la democracia y su capacidad de representar y dar participación a los ciudadanos.
Esa situación se produce en momentos en que en toda nuestra región se viene discutiendo la necesidad de una nueva institucionalidad para la democracia, lo que ha llevado a muchos autores a hablar de post democracia.
Eilyn Beltrán, director ejecutivo de la CEP presentó el panel «Movimientos Sociales, Comunicación Digital, Redes y nuevos desafíos de la Democracia», en el que interactuaron el politólogo Freddy Ángel Castro y Juan Carlos Rojas, especialista colombiano en Comunicación Política.
El politólogo y académico de la UASD afirmó que con la globalización de la información, a través de las comunicaciones modernas, se puede asistir a la transmisión y recepción de mensaje e informaciones de manera horizontal, simultánea y directa entre zonas opuestas del globo terráqueo.
Un error. Respondiendo a la pregunta de un participante, sobre si un “ousider” proveniente de Marcha Verde pudiera convertirse en candidato presidencial en las próximas elecciones, Castro advirtió que sería un error del movimiento tratar de suplantar a los partidos o convertirse en un partido político.
Rojas ilustró el poder de las nuevas comunicaciones y la cabal interpretación de lo que están expresando los ciudadanos en las redes sociales con el ejemplo de la victoria del no en el plebiscito efectuado en su país sobre el acuerdo de paz con las guerrillas colombianas.
Ilustró que en favor del sí estaban el Estado, los medios de comunicación, los grupos empresariales, las élites políticas y hasta el Papa Francisco, pese a lo cual triunfó el No, porque el movimiento que lo promovió interpretó lo que estaba diciendo una gran parte en los “insights”, perfiles expresivos que toman fuerza en las aspiraciones de la gente.
El antropólogo social mexicano Irvin Berlín Villafaña se refirió al valor de las imágenes, los mensajes y las aspiraciones que expresa la población, resultando conveniente que exista un cierto equilibrio entre esas expresiones ciudadanas y las políticas públicas que adoptan los gobiernos.
La politóloga Olaya Dotel concluyó el seminario afirmando que si bien las redes de internet están jugando un importante papel en los procesos de movilización, e incluso posibilitando el surgimiento de nuevos actores sociales y políticos, no son suficientes, ya que dejan fuera a la mayor parte de la población, que o no tiene acceso al internet, o que si bien tiene acceso no las usan para expresar opiniones políticas y menos para participar en discusiones sobre el tema.
La calle es insustituible. Por tanto el espacio de la calle es insustituible y la Marcha Verde, movimiento social que está definiendo la política del país, lo está demostrando, al dejar su huella, por las diferentes provincias, en un andar contagioso que ha involucrado al grueso de la sociedad dominicana, incluyendo los partidos políticos de oposición, precisó.