BAGDAD (AP).- Con 500 soldados estadounidenses muertos en Irak, el conflicto se ha convertido en el más letal desde la guerra de Vietnam, y eso podría intensificar las críticas a la ocupación estadounidense y brindar argumentos a los demócratas que tratan de derrotar al presidente George W. Bush en las elecciones de noviembre.

Aunque la cifra de 500 es puramente simbólica, añade premura a los esfuerzos del gobierno por buscar la ayuda de las Naciones Unidas en compartir la carga por estabilizar y reconstruir Irak y sacar a las tropas estadounidenses de un atolladero militar y político, dijeron analistas.

«Creo que el significado de la cifra de 500 es arbitrario para todos, excepto para el pobre soldado que fue el 500mo.», dijo Michael Donovan, del Centro de Información de Defensa de Washington. «Pero presumo que existe conciencia en el gobierno de que soportar este tipo de bajas de manera indefinida no es posible si intenta mantener el respaldo a la guerra».

La cifra de militares que murieron en Irak desde que se inició la invasión en marzo llegó a 500 el sábado, luego que una bomba estalló al costado de una carretera, al norte de Bagdad, matando a tres soldados. Dos miembros de la defensa civil de Irak también murieron en el ataque, que se registró cuando un vehículo blindado Bradley chocó contra un artefacto explosivo en un camino cerca de Taji, a unos 30 kilómetros al norte de la capital iraquí.

La cifra de muertos estadounidenses por el conflicto de Irak ha superado a las bajas en muchos conflictos regionales durante las últimas décadas: Líbano, Somalia, Panamá, Granada, Kosovo, Afganistán, y la primera guerra del golfo Pérsico. La mayoría de las muertes en Irak, tanto en enfrentamientos como en accidentes y suicidios, ocurrieron luego que Bush declaró el fin de las principales operaciones de combate el primero de mayo.

En la primera guerra del golfo Pérsico, en 1991, 315 estadounidenses murieron en el operativo para desalojar las fuerzas de Saddam Hussein de Kuwait.

Aún así, la cifra de muertos en Irak es pequeña comparada con las matanzas sufridas por efectivos militares estadounidenses en previos conflictos.

Unos 19.000 soldados estadounidenses murieron sólo en un mes en la Batalla de la Saliente, durante la segunda guerra mundial, donde la cifra total de muertos norteamericanos fue de 290.000. Otros 620.000 estadounidenses murieron en la guerra civil (1861-1865) y más de 58.000 en Vietnam.

Aunque los estadounidenses no parecen muy dispuestos a enfrentar sangrientos conflictos en tierras distantes, los analistas dijeron que las pérdidas de Estados Unidos en Irak no son lo bastante significativas como para causar una reacción popular contra la presencia norteamericana en el país árabe.

Lawrence J. Korb, vicepresidente del Consejo de Relaciones Exteriores, dijo que 500 era un umbral simbólico.

«Tal vez personas que no han prestado atención en semanas recientes, dirán, ‘creí que estábamos en mucha mejor situación que esa’, y ‘¨Qué está ocurriendo?’ Pero no creo que eso lleve a pedidos de que retiremos las tropas, o cosas similares», dijo en una entrevista telefónica.