RÍO DE JANEIRO (EFE).- La imagen del presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha comenzado a dar señales de desgaste un mes después del surgimiento de la más grave crisis en su gobierno con la multiplicación de denuncias de que líderes de su partido sobornaron a por lo menos un centenar de diputados aliados.

Tal conclusión se refiere a la encuesta de la agencia «Datafolha» divulgada hoy en la que consta un descenso del 72 al 62 por ciento el total de brasileños que considera honesto al presidente Lula.

El 78 por ciento opinó que hay corrupción en el gobierno, frente al 62 por ciento que se manifestó en similar encuesta realizada en junio pasado.

«Datafolha» entrevistó el jueves pasado a 2.110 residentes en 134 municipios.

El escándalo de corrupción, que comenzó con acusaciones de millonarios sobornos a congresistas para favorecer proyectos oficiales, tienen entre la espada y la pared al Partido de los Trabajadores (PT) con la aparición de indicios de que gran parte de los recursos provenían de entidades oficiales y «propinas» de empresarios favorecidos por contratos con el Estado.

Las acusaciones han provocado la renuncia del ex ministro jefe de la Presidencia, José Dirceu, hasta el mes pasado considerado el «hombre fuerte» de Lula en el gobierno, así como de la antigua cúpula del PT, compuesta por el presidente, el secretario y el tesorero.

En la evaluación hecha el jueves pasado al gobierno el grupo que lo considera ruin o pésimo pasó del 19 al 23 por ciento, la peor nota desde el comienzo de su mandato de cuatro años, en 2003.

Para el 40 por ciento el gobierno es regular y del 36 al 35 por ciento cayó el grupo que lo consideraba óptimo o bueno.

Pese a las fisuras en su imagen, Lula conserva el primer lugar en los sondeos de intención de voto para los comicios de 2006.

Entre sus más probables adversarios, aparece el alcalde de Sao Paulo, José Serra, a quien derrotaría con una proporción de votos del 34 y el 25 por ciento si la primera vuelta de los comicios se celebrara hoy.

Al gobernador del estado de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, Lula lo vencería en proporciones del 36 y el 16 por ciento. Y al ex presidente Fernando Henrique Cardoso lo doblegaría con parciales del 35 y el 15 por ciento.

Serra, Alckmin y Cardoso abanderan al Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB). EFE