El cantante mexicano Cristian Castro provocó que el Teatro La Fiesta del Hotel Jaragua se llenara a toda capacidad con su concierto Mi amigo el príncipe Tour 2012 la noche del jueves.
El hijo de la cantante y actriz Verónica Castro inició su esperada presentación a las 9:25 de la noche, tras las ocurrencias de la contraparte, el comediante Phillips Rodríguez, quien estuvo 20 minutos en el escenario haciendo reir al público.
Castro arrancó el espectáculo al estilo rockero, dizque para calentar la voz, con trozos de canciones como No podrás, Una canción de amor, Lloviendo estrellas y Vuélveme a querer.
Ya despojado de su vestuario de rock, con tres pantallas que facilitaban la vista del público, incluida una gigante al fondo del escenario, y dos preciosas bailarinas rubias, el artista de 37 años también interpretó Ay amor y Esta canción para ti.
Con un sonido impecable y acompañado de siete músicos, dos coristas y dos bailarinas, Cristian Castro hizo una pausa a las 10:10 de la noche para regresar con un vestuario más formal, tanto el cantante como los músicos. Era el momento del homenaje a José José, marcado por la algarabía de la gente, tantos jóvenes (mayoría mujeres) como personas más adultas (40 a 50 años), desde los primeros acordes del éxito Amor amor.
La parte romántica del concierto continuó con Gavilán o paloma, Si me dejas ahora y un popurrí cantado por la gente de principio a fin con los temas Lo que un día fue no será, Volván y Lo pasado pasado.
El tributo al príncipe finalizó con las composiciones El triste y Buenos días amor.
Tras otra pausa y en lo que el escenario lo ponían más íntimo, Cristian volvió acústico para entonar un medley con Después de ti, Lo mejor de mí, Por amarte así y Yo quería.
Entre la emoción de las féminas, un ramo de flores que le regaló una fans y una que otra foto con dos admiradoras, el artista azteca dijo a las 10:50 de la noche, vamos a cantar e hizo completa la canción Lloran las rosas y Azul.
Y como mexicano al fin, no podía faltar la ranchera. Fue así como vocalizó Yo no me casaré, secuenciada, cual si estuviera acompañado de un mariachi.
La despedida llegó a las 11:10 p.m. con Azul, otra de los escasos temas que interpretó completos.