POR ROSA ALCANTARA
El presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Ramón Alburquerque, dijo ayer que en vez del presidente Leonel Fernández ser ente de equilibrio le declara la guerra al Congreso, a los miembros de la Junta Central Electoral, de la Suprema Corte de Justicia y a los ayuntamientos.
Dijo que el país está ante un político lleno de miedo y desbordado por la derrota que le espera. Un presidente así, de comportamiento impredecible, crea incertidumbre y conduce al país hacia la ingobernabilidad, expresó Alburquerque.
El dirigente perredeísta aseguró que los partidos de la alianza PRD-PRSC no le temen al gobierno, ni al Partido de la Liberación Dominicana (PLD) ni a sus aliados.
Consideró que el Presidente de la República ha rebajado su investidura para terciar frente a los candidatos a regidores, síndicos, diputados y senadores de la oposición. Dijo que el PLD no se ocupó de la formación de liderazgos fuertes en los barrios, en los municipios y en las provincias.
La verdad es que por mucho tiempo, el PLD no creyó en la democracia, sino en las luchas insurrecciónales de liberación nacional, manifestó.
Entiende que el presidente Fernández se canta y se llora, porque maldice la alianza PRD-PRSC en medio de un acto para recibir apoyo de un grupito de reformistas. Asimismo, criticó que el mandatario maldiga al PRD mientras busca a unos cuantos de sus descontentos.
El corderito Leonel Fernández se ha vuelto un león herido que lanza llamas porque ya sabe de su derrota inminente expresó el presidente del PRD. Dijo que el gobierno ha sido incapaz de resolver la crisis eléctrica, no se interesa por la seguridad social ni la seguridad ciudadana, la comida cara y el aumento del desempleo.
Manifestó que el doctor Fernández usa el Palacio Nacional y el poder del Gobierno para sonsacar dirigentes de los partidos contrarios y agregó que esa es una actitud que propia de dirigentes desesperados y despóticos.
Nada hace más daño a la democracia que la falta de escrúpulos desde el poder, dijo. Alburquerque afirmó que con la alianza PRD-PRSC la nación marchará por rutas de prosperidad.
Sostuvo que el presidente Fernández quiere el Congreso para crear más impuestos; para nombrar una Junta Central Electoral que obedezca sus órdenes y aunque dirigió la elección de los actuales jueces de la Suprema Corte de Justicia, ya no confía en ellos, por tanto se propone nombrar otros que le sean obedientes.