BOGOTA, (AFP) – El presidente colombiano Alvaro Uribe puso fin abruptamente a la mediación de su homólogo venezolano Hugo Chávez para liberar a los rehenes de las FARC, aunque aseguró que seguirá buscando esa meta por una vía discreta, mientras recibía críticas de familiares y un llamado de París al diálogo.

 Uribe insistió ayer en un discurso, que mantendrá «todos los esfuerzos por la paz y el acuerdo humanitario pero teniendo en cuenta que no se puede poner a riesgo la seguridad democrática», su estrategia antiguerrilla, apoyada por Washington.

 «Preferimos la discreción, el trabajo interno y persistente porque la liberación de todos los secuestrados y el logro de una solución humanitaria y definitiva es un objetivo central», explicó el alto comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo, en una rueda de prensa.

 La cancillería venezolana señaló que «acepta la decisión soberana» de Colombia «pero manifiesta su frustración dado que de esta manera, se aborta un proceso que se venía llevando con pulso firme y en medio de grandes dificultades».

 La noche del miércoles, Uribe anunció en un comunicado que daba por concluida la mediación de Chávez, iniciada el 31 de agosto a pedido de Bogotá, en reacción a una llamada telefónica del presidente venezolano al comandante del Ejército colombiano, general Mario Montoya, para interrogarlo sobre los secuestrados.

 «El presidente de la República da por terminada la facilitación de la senadora (colombiana) Piedad Córdoba y la mediación del presidente Hugo Chávez, a quienes agradece la ayuda», señaló el texto.  La misma nota explica que antes, durante una reunión bilateral al margen de la pasada Cumbre Iberoamericana en Santiago, Uribe dejó en claro «que no estaba de acuerdo con que el presidente de la República Bolivariana de Venezuela se comunicara directamente con el alto mando institucional colombiano». La senadora Córdoba se mostró desde Caracas desconcertada por la decisión.

Lamenta decisión; sigue dispuesto

  CARACAS (AP) — El presidente Hugo Chávez lamentó ayer la intempestiva decisión del presidente colombiano Alvaro Uribe de terminar la mediación que realizaba para un canje humanitario en el vecino país, pero afirmó que sigue a dispuesto a aliviar las penas de Colombia.  “Yo respeto la decisión del presidente Uribe, lo lamento mucho, en primer lugar por los prisioneros, quienes están en manos de la guerrilla y quienes están en algunas cárceles son guerrilleros, sus familiares, sus seres queridos; pero también por Colombia”, dijo Chávez en horas de la noche en acto masivo con sus partidarios. 

“Ese camino que se vino abriendo, difícil, pero venía abriéndose el camino, yo creo que pudo haber sido el camino a un acuerdo de paz más allá, más difícil todavía, pero era como el inicio de un dialogo para tratar que vuelva la paz en Colombia”, indicó.  “Yo ratifico mi amor a Colombia… ya hablaremos para aclarar las razones y las causas. Yo actúo de mediador sólo si ambas partes están de acuerdo, si una de las dos no está de acuerdo, yo no puedo ser mediador”, acotó.  “Nos ponemos a la orden para aliviar las penas del pueblo de Colombia”, agregó.   Colombia expresó el miércoles en un comunicado que tomó la decisión de terminar la mediación porque había advertido que Chávez no debía comunicarse directamente con los mandos militares colombianos.