Nueva York (EFE).- El precio del crudo de Texas bajó ayer casi un dólar y quedó por debajo de los 69 dólares en Nueva York por primera vez en más de un mes, tras conocerse que aumentaron en más de un millón de barriles las reservas de gasolina en Estados Unidos.    Al cierre de la sesión regular en la Bolsa Mercantil de Nueva York (NYMEX), los contratos para junio de Petróleo Intermedio de Texas (WTI) bajaron 84 centavos y quedaron a 68,69 dólares/barril (159 litros).  La última vez en que este tipo de contrato concluyó en esos niveles fue el 12 de abril, cuando cerró la sesión a 68,62 dólares.

Los contratos de gasolina con su entrega prevista en junio finalizaron a 1,9751 dólares/galón (3,78 litros), después de descender 5 centavos.  El gasóleo de calefacción para ese mismo mes se situó en 1,9212 dólares/galón, 3 centavos menos que el martes.  Los contratos de gas natural para junio concluyeron a 6,12 dólares por mil pies cúbicos, después de un retroceso de 12 centavos.

Los datos sobre reservas del informe semanal del Departamento de Energía (DOE), así como otros relativos a la demanda y a la actividad de las refinerías estadounidenses, contribuyeron ayer a que los precios del crudo y de los combustibles recuperasen la tendencia a la baja con que iniciaron la semana.

Las reservas de crudo descendieron durante la pasada semana en 100.000 barriles pero el total, de 346,9 millones, supera en casi el 5 por ciento el volumen de hace un año.

Las existencias de gasolina aumentaron en 1,3 millones de barriles y elevó el total a 206,4 millones de barriles, una cifra que está aún el 3,5 por ciento por debajo de la que se registraba en igual periodo del año pasado.  Las reservas de este combustible han subido en 5,8 millones de barriles en tres semanas consecutivas, lo que ha contribuido a rebajar la inquietud en torno a si la oferta será adecuada para compensar la demanda en EEUU en próximos meses.

Las existencias de productos destilados, que incluyen el gasóleo de calefacción y el diesel, disminuyeron en 100.000 barriles aunque el total, de 114,6 millones, es el 7,3 por ciento superior al volumen de hace un año.

   Las refinerías de EEUU trabajaron la pasada semana al 89,8 por ciento de capacidad, comparado con el 90,2 por ciento de la semana precedente, pero eso no impidió que aumentase la producción de gasolina, a una media de 9,2 millones de barriles diarios.

   Las importaciones de ese combustible también fueron elevadas y se situaron en una media de 1,45 millones de barriles diarios, el tercer registro semanal más alto contabilizado hasta ahora.

   Los operadores también estaban pendientes de los datos sobre demanda de gasolina y otros combustibles, después de que en las últimas semanas evaluadas se percibieran signos de un retroceso en el consumo a causa de los elevados precios en la venta al público.

   Las estimaciones del DOE revelaron que la demanda se ha mantenido prácticamente en los mismos niveles del año pasado y en el caso de la gasolina fue de 9,2 millones de barriles diarios en las últimas cuatro semanas, el 0,2 por ciento más que en 2005.

   La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) también ha revisado a la baja sus estimaciones sobre el crecimiento de la demanda global de petróleo para este año, que será de 1,4 millones de barriles diarios respecto de 2005.

   Esa cifra es inferior en 60.000 barriles diarios a los cálculos que había hecho un mes antes y lo justifica en que los elevados precios del crudo han contribuido a ralentizar el aumento de la demanda sobre todo en los países desarrollados.