CARLOS NINA GOMEZ
A madiados de julio, tentativamente el 15 de ese mes, Shane Mosley y Fernando Vargas volverán a contender. Tendrán una segunda pelea que se realizará en Las Vegas, estado de Nevada. Mosley, quien ya en un primer combate -montado también en Las Vegas el pasado 25 de febrero-, aspira a una tercera pelea súper millonaria con Oscar de la Hoya.

De la Hoya, tras su sonado triunfo el pasado seis de este mes ante Ricardo Mayorga, podría decidirse enfrentar a Mosley porque quizás quiera vengarse de las dos derrotas que ha sufrido ante su paisano estadounidense.

Pero hay que exponer, para darle “más sabor al boxeo”, que Fernando Vargas también tiene una espinita que quitarse. Una espinita que le clavó, en el 2002, el propio De la Hoya cuando lo noqueó en un pleito de los pesos medianos juniors (154 libras).

Mosley, en reciente declaración a una cadena hispana, dijo que “estoy emocionado de pelear de nuevo con Fernando Vargas y una vez más voy a demostrar que soy un boxeador superior”.

Este segundo combate, que tendrá como escenario el monumental hotel de MGM, en su singular Grand Garden Arena, podría dejar -en bruto- más de 15 millones de dólares.

Vargas, quien presenta un expediente profesional de 36-3 -los tres fracasos de Vargas han sido ante De la Hoya, Mosley y Félix “Tito” Trinidad-, fue vapuleado por Mosley en el décimo round. El árbitro se vio obligado a detener las acciones en ese round para declarar ganador a Mosley por nocaut técnico. Vargas terminó la pelea con un ojo completamente hinchado y con la visión apagada.

Fernando Vargas, si vuelve a caer ante Mosley, podría estar señalando el final de su carrera.

Pero si logra desquitarse la amarga derrota que le propinó Mosley el pasado 25 de febrero, entonces el gladiador estadounidense de origen mexicano estaría todavía firme en los ensogados.

Mosley, quien es oriundo del pueblo de Pomona, California y ya con 34 años a cuesta (registro de 42-2 con 36 victorias por nocaut), no pierde la esperanza de enfrentarse, por tercera ocasión, a De la Hoya.

Aunque quiero ratificar que De la Hoya, quien realizará su última pelea este mismo año para decirle definitivamente adiós al boxeo, tiene en la “mira” al invicto Floyd Mayweather.

Sin embargo, no es del todo descartable que se pacte una nueva reyerta Mosley-De la Hoya en razón de que el Golden Boy, para contender con Mayweather debe ser en los medianos juniors, una división en la que ha vuelto a ser monarca mundial.

De todas maneras, en julio próximo, sin importar quién gane o pierda, la fanaticada del boxeo volverá a disfrutar de buen boxeo cuando regresen al ring Fernando Vargas y Shane Mosley.

Mientras tanto, De la Hoya estará pendiente del resultado para entonces determinar quién debe ser su último enemigo encima del cuadrilátero.

En un próximo artículo, tras el resultado del combate Mosley-Vargas -o quizás antes-, les haré una trascendente revelación que envuelve a Oscar de la Hoya.

AL MARGEN: Cada sábado, de una a dos de la tarde por la cadena televisiva CDN (canal 37), la fanaticada tiene una cita con el programa Momentos del Boxeo que compartimos con los colegas José Oscar Fernández y Freddy Núñez Jorge…Es un programa objetivo y plural donde el boxeo local tiene una casa donde auxiliarse.