Cuadrilátero
El caso de Joan Guzmán en el boxeo

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De entrada: Todo el mundo sabe que he sido un firme defensor de Joan Guzmán y que, incluso, me he ganado enemigos en el país por defenderlo.

Y que he seguido su grandiosa carrera no sólo como boxeador profesional, sino en el nivel amateur.

 Pero como periodista debo ser objetivo, sincero y apegado a lo más puro de la ética profesional.

Aclaro también: el único periodista dominicano que con tiempo de antelación a sus combates ha estado presente en el cuartel de sus entrenamientos, como lo volví hacer ahora tras mi viaje a la ciudad de Las Vegas,  Nevada. ¡…Para tener a manos toda la verdad de su accionar atlético en el gimnasio!

 Pero mi condición de periodista profesional y defensor de los principios, no lo cambió por patriotismo trasnochado y mucho menos por lisonjería.

La realidad de Joan

La realidad que hoy abate a Joan Guzmán, frustrado aspirante a conquistar el campeonato mundial del peso ligero (135 libras).

Guzmán, ganador de dos correas mundiales en diferentes categorías (supergallo y ligero junior), tuvo serios problemas para defender sus fajas.

 Al extremo que se vio en la «necesidad» de abdicar, primero a la faja supergallo y tras hacer dos defensas, también entregar el cetro ligero junior, ambos con el respaldo de la OMB.

Entonces fue a probar «suerte» en la categoría de los ligeros. En esa división la OMB lo colocó como retador oficial al cinturón de Campbell. Fue llevado a la casilla número 1 en el ranking de la OMB pese a que nunca ha peleado en los ligeros.

 Le llegó la oportunidad, aquel fatídico 13 de septiembre, para volver a ser monarca del mundo…¡pero todo se derrumbó!

 Fue confirmado que el ex doble monarca del mundo, por tratar de rebajar las tres libras y cinco onzas y llegar al peso reglamentario para poder enfrentar al estadounidense Nate  Campbell, sufrió un desmayo y fue llevado de urgencia a un centro médico de Bilox, del estado de Mississippii.

 Su esposa, Angélica Mejía,  confirmó que Joan Guzmán   «estaba deshidratado después de hacer un esfuerzo para rebajar las libras demás».

  Esa situación fue la que realmente justificó que el gladiador nacido en Guachupita no se presentara al ring para cruzar guantes con el monarca estadounidense.

  Asimismo, se supo que Guzmán también sufrió mareos por lo que los médicos le recomendaron descanso y no presentarse a la pelea.

 Considero que Guzmán deberá «reflexionar» y saber si realmente puede seguir activo en el rudo deporte de los puños enguantados.

Esa es la historia.

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