Hoy 
El criterio que externé hace una semana, en un análisis publicado en este diario, acaba de concretarse: Oscar de la Hoya rehuyó una pelea con el mexicano Antonio Margarito, flamante campeón welter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
En el análisis expuse que De la Hoya, para despedirse de su brillante carrera, prefería contender con el felipino Manny Pacquiao…¡y no enfrentarse al aguerrido Margarito!
Para el seis de diciembre ha sido pautada la pelea De la Hoya-Pacquiao. No habrá en juego ninguna corona mundial.
Sí estarán en juego -y es lo más importante para los pugilistas, el promotor Bob Arum y la compañía Golden Boy Promotions- más de 100 millones de dólares. Y De la Hoya, de nuevo, será el gran ganador de muchos millones. Quizás gane entre 25 y 30 millones, según mi percepción.
Mientras que Pacquiao podría recibir entre 15 y 18 millones, también según mi neófita percepción financiera. ¡Pero es demasiado dinero para Pacquiao!
Tampoco a Bob Arum y a su cliente Pacquiao les importa el resultado del combate que será montado en el lujoso hotel MGM, de Las Vegas, estado de Nevada.Lo que les importa es el gran dinero que habrá envuelto en el desigual pleito de puños enguantados.
Bob Arum sabe muy bien que Pacquiao, que será un inflado peso welter, no tiene ninguna posiblidad de vencer a De la Hoya, aunque el Golden Boy esté en declive.
Una vergüenza para el boxeo
Es lamentable que el boxeo moderno acepte lo que ocurrirá el seis de diciembre. Y lo que va a ocurrir el seis de diciembre es una farsa. Vamos a poner en mayúscula este calificativo: una FARSA.
Será una vergüenza para el boxeo…y un terrible engaño a los fanáticos al tiempo de que De la Hoya, sin duda uno de los grandes del boxeo moderno -y yo lo encasillo en el lugar nueve en mi libro que titulo Gigantes del Boxeo Hispano- no tendrá un retiro feliz. Aunque salga airoso en la FARSA, como será, su prestigio quedará en tela de juicio. En otros trabajos analizaré por qué Oscar quedará desprestigiado, aunque se gane todo el dinero del mundo.
