POR CARLOS NINA GÓMEZ
Ruddy Zapta, considerado el más capacitado de los entrenadores del boxeo olímpico del país, sigue muerto…¡y prácticamente sin dolientes! La frase que encabeza la columna de hoy puede ser calificada como «una figura de la literatura deportiva dominicana».
Pero no la escribo por un cumplido que puede satisfacer a los muertos.
La escribo porque su contenido también obedece a una realidad (dominicana) que es tradicional y que se sintetiza en esta otra frase que forma parte del léxito popular: «El que se muere, con tierra tiene».
No importa que usted haya sido un sacrificado por la patria…un héroe nacional, un patriota. Cuando usted se va «al más allá», al final -aunque en los primeros día, semanas o meses de su ida se le ofrezcan todos los honores- lo olvidan. ¡Y muchas veces no se acuerdan de sus hechos trascendentes en favor de la patria!.
En el caso del deporte dominicano, sucede igual…porque el deporte y sus protagonistas no constituyen un segmento aislado del quehacer nacional.
Juan Pablo Duarte, el más límpido dominicano, el que hizo posible nuestra nacionalidad, quien desde niño accionó por la salud de la patria, también es olvidado -y pisoteados sus ideales- por la insensibilidad que patrocinan apátridas de ayer y de ahora.
Ruddy Zapata, fallecido cuando apenas había cumplido unos 43 años, hizo grandes aportes a la disciplina de sus amores: El boxeo aficionado.
Que se conduelan el Congreso y las autoridades deportivas
La joven Antonia Valdez Martínez, la fiel esposa de Ruddy Zapata, ocasionó que mis ojos casi se anegaran de lágrimas cuando la entrevistamos en el programa Momento del Boxeo que se difunde cada sábado en la tarde por CDN (canal 37) y que realizamos junto a los colegas José Oscar Fernández y Freddy Núñez Jorge.
Antonia hizo la siguiente revelación: «La pensión que hace cuatro años -días antes de fallecer Ruddy- fue aprobada por el Congreso Nacional todavía no la hemos recibido».
Ciertamente, los hijos (pequeños, cuyas edades no llegan a diez años) y la viuda de Ruddy Zapata nunca han cobrado la pensión que días antes de su deceso, hace exactamente cuatro años, le otorgó el Congreso Nacional al eficiente y sacrificado entrenador de la seleccción nacional de boxeo olímpico.
Ruddy, con quien compartí muchas veces en medio de su excelente labor como director técnico del equipo olímpico dominicano, murió el 28 de marzo de 2003 hecho que conmovió a la familia deportista dominicana.
Debo significar que la pensión a favor de Zapata fue aprobada por los congresistas a sabiendas de que nuestro experimentado técnico, siempre jovial y mejor amigo no vencería la terrible enfermedad que lo atacaba…¡y que finalmente le ganó la pelea!.
La pensión, de RD$12,000.00 mensuales y a cuatro años de su aprobación, serviría para parte de la manutención de su viuda, doña Antonia Valdez Martínez y de los niños Omar Abel y Ruddianny Zapata Valdez, hijos del matrimonio.
Tampoco la viuda de Zapata ha recibido -y esto sí que es muy lamentable- la pensión que el Estado otorga a los inmortales del Deporte y que ronda los RD$15,000.00.
Zapata fue exaltado al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano en octubre del 2006, junto a los beisbolistas Diego Hurtado Brugal y Juan Samuel, el baloncestista Vinicio Muñoz, el tenista Rafael Moreno y el ex boxeador Lachi Linares.
Sé, y lo repito, que los muertos -aunque la demagogia y la hipocresía supuestamente los exalten-, no son recordados, se olvidan de ellos, «porque quien se muere no no tiene quien le escriba», pero que por lo menos nuestras autoridades respeten las leyes y las disposiciones administrativas…y entreguen esas pensiones a la viuda e hijos de nuestro Ruddy Zapata a quien nosotros, quienes amamos el boxeo, nunca vamos a olvidar.
Después de todo, no debemos ser tan escépticos y por lo menos tener esperanza en la sensibilidad humana y deportiva de Felipe Payano, el bonachón secretario de Deportes.
Porque en la práctica, y sin actuar con palabra huecas, Felipe Payano ha sido un ministro deportivo cumplidor y solidario para con las causas favorables al deporte y a su gente más necesitada.
AL MARGEN. Johnny Naranjo es uno de los más talentosos miembros de la crónica deportiva dominicana. ¡Qué lastima que por problemas de salud él no esté tan activo, como antes, en sus programas de radio y televisión!. Johnny Naranjo, además, es un ejemplar ciudadano dominicano que engrandece a la crónica deportiva nacional.
carlosninagomez@yahoo.com