El modelo de vida en los hogares dominicanos ha variado desde hace algunos años. Antes, el sustento de la familia era solo tarea del hombre. Salir a la calle, tempranito, a buscar la comida de sus hijos, es una acción que no es sólo “cosa de hombres” en estos tiempos.

El rol de la mujer se limitaba a realizar los quehaceres de la casa y preocuparse con cuidar a los niños, velando porque estos tengan una formación fundamentada en los valores.

Actualmente, en este mundo tan “moderno”, los roles parecen haberse invertido. Ya no es de extrañar que sean las mujeres  quienes salgan a trabajar y sean quienes lleven el dinero a la casa, y que entonces los hombres se conviertan en “los amos de casa”, y se dediquen a cuidar a los niños.

Un acto vergonzoso.  Es posible que antes, cuando estos casos no eran tan comunes en la población, los hombres que estaban involucrados pudieran en algún momento sentirse avergonzados por el hecho. Pero ahora, al ser una acción frecuente, tanto en nuestra sociedad como en otras en el extranjero, es algo casi normal entre los dominicanos.

Según un estudio que realizó el Centro de Estudios Sociales y Demográficos (CESDEM) en el año 2007, existía un 35 por ciento de los hogares dominicanos que tenían a una mujer como jefa. 

No sólo en lo económico. Pero este liderazgo femenino que está imperando en en la sociedad, no sólo se da  a nivel económico.

A través de los tiempos siempre se ha reconocido la capacidad intrínseca que tienen las mujeres, como administradoras.

También es frecuente  ver los hogares donde son los hombres quienes trabajan, pero el dinero es administrado por la mujer.

Pero, puede darse el caso de que la mujer, aunque se encuentre empleada, sea   quien determina qué y cuándo se deben hacer las cosas en la casa.

La cifra

35% Estudio.  Según la Encuesta Demográfica y de Salud ENDESA 2007, este es el porcentaje de mujeres que lidera los hogares dominicanos.