Como en el país la cultura del reciclaje está en proceso de desarrollo, normalmente cuando un objeto pierde su función original, se desecha. Eso pasa mucho con las cajas de madera, que aunque a veces no se boten, se amontonan o se guardan en un rincón, sin saber que pueden volverse parte de la decoración de algún espacio.

Y aunque con estas cajas se pueden crear infinitos elementos decorativos, en esta ocasión hablaremos de estanterías. El hecho de que tengan un hueco las hace excelentes para colgar en la pared y crear un original escaparate para cualquier parte de la casa u oficina.

Además de ayudar en la decoración, esta puede ser una herramienta para mantener el orden, pues permite almacenar diversos artículos dentro de ella.

La idea es colgarla en la pared (se ven muy bien cuando es más de una). La forma de colocarlas dependerá de lo que quieras lograr; puedes jugar con las formas e intercalar las cajas colocándolas una de forma horizontal y otra vertical.

¿Con o sin color? Dependiendo del gusto de la persona y del concepto que manejes para usar estas cajas, puedes darle color o utilizarlas de manera natural.

En cualquier parte de la casa. Estas cajas tienen la ventaja de que van muy bien en la sala, en el baño, en una habitación de adultos, en una de niños y hasta en el jardín. Tu eliges donde quieres lucir tu nueva estantería.

Crea tu estilo. Es tu preferencia si quieres colocarla en la pared como una estantería fija o ponerla en el suelo una encima de la otra, que te da la oportunidad de moverla de lugar cuando quieras hacer cambios en tus espacios.

Úsalas para lo que quieras. La versatilidad de estas cajas es tal, que no hay límites para colocar objetos dentro de ellas. Las opciones van desde artículos decorativos (jarrones y demás), plantas ornamentales, zapatos y carteras (en el caso de estar en la habitación) y juguetes, si es en el espacio de los pequeños.