Anuncios comerciales engañosos y contraproducentes

Anuncios comerciales engañosos y contraproducentes

Cuando una empresa utiliza un medio de comunicación, sea este hablado, escrito, radial o televisado, lo hace con el propósito de que lo anunciado, sin importar el destino final, es con el objetivo de que el mismo penetre en el público al cual va dirigido directamente, o de manera sutil, indirectamente.
Soy un activo y casi diario observador de los juegos de pelota, dependiendo de la estación. Si es invierno, de los juegos de las Águilas Cibaeñas, equipo del cual soy seguidor. En primavera, verano y otoño, de los juegos de la Ligas Mayores, tanto de la Nacional como de la Americana en los cuales, en cada entrada, se pasa un anuncio, que aparte de darme repugnancia por la manera estúpida de su mensaje, le hace más daño que bien al propósito que quieren disimular y que no es otro, que meterle por boca y nariz al dominicano, la bonanza de la termoeléctrica que se está construyendo actualmente en Punta Catalina, provincia Peravia.
Oír a un simple obrero del montón querer filosofar sobre la magnitud y el alcance de la planta en construcción en Punta Catalina para generar electricidad, es pensar que el coeficiente y el nivel educacional de los dominicanos, ronda la tipificación que otorga el organismo de las Naciones Unidas para la Ciencia y la Cultura (UNESCO), como analfabeto funcional.
El protagonista del comercial llamado Iqueas Rodríguez, se define como uno de los más de 5,000 obreros que laboran en Punta Catalina y en su calidad de “faculto” por ser conocedor del alcance y el poder de generación que tendrá esta mega obra, responde a dos preguntas con la intención de edificar al pueblo dominicano de la importancia de este importante proyecto ganado en “buena lid” por la constructora brasileña Odebrecht.
¿Cuáles son las preguntas que responde? ¿Qué significa para la República Dominicana Punta Catalina? para este “obrero especializado”: será el fin de los apagones, por el incremento de kilowatts que la misma adicionará al sistema. La segunda pregunta fue la más interesante y contestada de una manera infantil. ¿Por qué será una planta de carbón? Aquí el “cienciólogo” se explayó. señalando que el carbón a ser utilizado no es vegetal, sino es mineral extraído de las entrañas de la tierra y además es el más barato y abundante para uso industrial. Agregó además, porque yo trabajo aquí conozco la verdad, no se dejen engañar ya que Punta Catalina significará el fin de los apagones.
Existe un movimiento cívico tendente a que el contrato de construcción de Punta Catalina sea rescindido por el Estado Dominicano, lo cual consideramos de llegarse a producir, un grave error, ya que Odebrecht como constructora posee la más avanzada técnica que nuestro país puede pagar. Los sobornos y coimas deben ser considerados materia aparte. Lo que se debe hacer es buscar una compañía que supervise y contabilice los gastos que generalmente conlleva este tipo de construcción. Ahora bien, la que está supervisando actualmente es una compañía que forma parte de los suministradores de equipos y materiales, por lo cual debe descartarse porque no podemos permitir que sea juez y a la vez parte.
Correr el riesgo de rescindir el contrato de construcción de Punta Catalina es no percatarse del tiempo y de la adecuación de la nueva constructora para continuar los trabajos, que según se afirma están avanzados en un 70%. El razonamiento campesino de que “no se debe cambiar de montura cuando se está cruzando un río”, es muy válido, a no ser que la contraparte afirme, que no se quiere cambiar de montura, “sino de jinete”. Parodiando un eslogan de un programa televisivo: “Sea Ud. el jurado”.

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