Hoy 
POR LUIS M. CÁRDENAS Y LLENNIS JIMÉNEZ
La Comisión Nacional de Emergencia (COE) informó anoche que 1,775 personas fueron alojadas en refugios en San Juan de la Maguana, en prevención de la crecida de ríos, mientras que se registraban lluvias en diferentes lugares del territorio como consecuencia de los efectos del huracán Iván.
Anteayer murieron cuatro menores de edad ahogados, y ayer se reportó que dos viviendas fueron destruidas y otras 20 casas inundadas por las lluvias y los vientos que acompañan al huracán Iván.
Tres hermanos murieron ahogados en el mar Caribe anteayer. Fueron identificados como Eudomar, de 12 años, Richard, de 13, y Andreína de la Rosa Herrera, 15 años. Residían en Los Frailes, en Santo Domingo Este. Eran hijos de Raúl de la Rosa y Carmen Herrera.
Claudina de la Paz, de 17 años, la cuarta víctima, se ahogó cuando intentaba tomar los peces que arrojaban las olas en el litoral.
El presidente del COE, mayor general retirado Luis Antonio Luna Paulino, dijo que 1,200 personas fueron albergadas en el estadio Hermanos Suárez, 325 en el local de la secretaría de Agricultura y 250 en casas de familiares y amigos, en San Juan de la Maguana.
En la tarde dispuso, informó, el envío de raciones alimenticias para los refugiados.
El huracán Iván pasó a 280 kilómetros al sur-suroeste de la isla Beata, en el extremo sur de la península de Barahona.
A las 10:00 de la noche el COE informó que no se habían registrado muerte como consecuencia directa de los efectos del huracán, ni obstrucción de carretera por los fuertes oleajes en toda la costa sur.
El COE reportó lluvias en Santiago, Barahona, Constanza, Bonao, Baní, Villa Altagracia, Hondo Valle, Oviedo, Pedernales, Vicente Noble, Rancho Arriba, Ocoa, Santo Domingo, Villa Jaragua, Azua, Rincón de Yuboa, San José de Ocoa, Monte Plata, isla Saona, Puerto Plata y San Juan de la Maguana.
Brigadas de la Defensa Civil, la Policía y los Bomberos, informó Luna Paulinao, mantuvieron una vigilancia en el malecón de Santo Domingo para evitar que varios cientos de personas se acercaran a los arrecifes.
No se reportaron inundaciones, dijo, como consecuencia de las lluvias, y que mantenía a todo su personal en alerta.
Las fuerzas del oleaje destruyeron el pavimento y parte de los asientos de concreto de la avenida 30 de Mayo, en el Distrito Nacional. Fue necesario cerrar al paso de vehículos varios tramos que tenían escombros y piedras. El viento derribó pequeños árboles.
Adultos y niños recogían los peces que el oleaje lanzaba al pavimento el parque del litoral. Había anguilas, cangrejos y gran cantidad de moluscos.
El Ayuntamiento del Distrito Nacional y la secretaría de Obras Públicas empezaron a limpiar el área cerca del mediodía, con ayuda de la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMET). El carril más cercano al litoral fue cerrado desde el kilómetro seis hasta el kilómetro once, para prevenir accidentes en la 30 de Mayo.
La medida, que adopto desde temprano en la mañana, taponó la avenida Independencia y otras calles del área, lo que causó que muchas personas llegaran tarde a sus centros de trabajo y estudio.
Cientos de personas se concentraron frente al mar para observar el espectáculos de las olas que se elevaban a más de trece metros y llegaban hasta la calle, en algunos lugares casi 50 metros tierra adentro.
