Cuatro italianos universales

Cuatro italianos universales

JOSÉ ANTONIO NÚÑEZ FERNÁNDEZ
Para hablar de ilustres italianos, no solamente serían cuatro, sino más de cuatro mil. Pero nosotros dentro de un reducido espacio y de manera breve, nos proponemos hacer sucintas menciones o leves revelaciones acerca de Antonio Gramsci, Palmiro Togliatti, Benedetto Croce y Umberto Eco.

En el 1921 Antonio Gramsci y Palmiro Togliatti fundaron el Partido Comunista Italiano. El político y filósofo Gramsci era un activo revolucionario, un hombre de combate que en el 1917 participó en la violenta insurrección de los obreros de su nación. En el 1924 ocupó la Secretaría General del P C I, siendo además elegido como diputado.

En 1926 fue encarcelado y condenado por un tribunal del fascismo a veinte años de prisión. De este hombre hay que afirmar que fue él, un estudioso de la estética, de la sociología, de la historia de la filosofía y de la cultura italiana en general. Sus tareas de más contundencia las centró y las concentró en el seno del serio asunto de la relación marxista entre las “bases” y la superestructura, vale decir, entre el proletariado y la intelectualidad. Según él, el filósofo real no es y no puede ser otra cosa que el político. De sus obras el más famoso libro es “Cartas desde la cárcel”.

Palmiro Togliatti fundó en el 1921 junto con Gramsci el Partido Comunista de Italia, del cual fue Secretario General en los días muy peligrosos del fascismo de “II Duce” don Benito Mussolini. Llegó un momento crítico en que Togliatti de tuvo que marcharse al exilio. Pero por los gajes de la política, Palmiro Togliatti de 1944 a 1945 fue Vicepresidente de Italia y también fue Ministro de Justicia de 1945 a 1946.

Palmiro Togliatti se manifestó cierta vez a favor de la “desestalinización” y además abogó por el “policentrismo” en el seno del movimiento comunista.

El policentrismo viene siendo el sistema que admite, que acepta, varios centros de dirección o de decisión. Togliatti falleció en el 1964 y en su sepelio pronunció un elocuente panegírico la revolucionaria española, veterana de la Guerra Civil de 1936 a 1939, Dolores Ibárruri (La Pasionaria).

Benedetto Croce como filósofo enarboló las banderas del neoidealismo italiano, él fue un fiero enemigo, un encarnizado opositor del fascismo y sus actividades políticas en muchos momentos, en muchos aspectos fueron como un fanal que indicaba y señalaba rutas de luz a la vida italiana de su tiempo.

Benedetto Croce como filósofo resultó un neohegeliano. El se dedicó a rescatar lo vivo de la filosofía del alemán Guillermo Hegel. Croce estableció cuatro grados de ascensión del espíritu universal. O sea: Lo estético o encarnación del espíritu en lo individual. Lo lógico o esfera de lo universal. Lo económico o esfera de los intereses particulares y finalmente, lo ético o esfera del interés universal.

Benedetto Croce es autor de “Filosofía del espíritu” y también de “Lo vivo y lo muerto en la filosofía de Hegel”.

Y ahora y ya para la conclusión, el turno del cierre le corresponda al cuarto italiano universal: Umberto Eco. Lingüística, escritor, semiólogo, famoso investigador de los medios de comunicación de masas y profesor meritísimo de semiología. La semiología o semiótica representa la teoría de los signos.

El maestro Umberto Eco ha acumulado veintiséis títulos honoris causa de universidades de todo el planeta. El ha establecido la diferencia entre “el ocultista”, que trata de descalificar los signos, en una dirección equivocada, y el semiólogo racionalista. Eco califica “el ocultismo” como un cáncer intelectual de interpretaciones incontroladas.

Eco es un medievalista profundo para quien, la nueva Edad Media ha comenzado ya, por causa o culpa de la distorsión de las sociedades occidentales industrializadas y también por causa y por culpa de la progresiva disolución del ser liberal. El afirma que su obra “El nombre de la rosa” es una enciclopedia de la mejor Edad Media. Umberto Eco puso a circular recientemente un libro llamado “Al ritmo del camarón”. Ese libro tiene como subtítulo “Guerras calientes y populismo mediático”. En este libro, se afirma, que el maestro Eco se hace eco y critica al gobierno de mister Bush y también al gobierno del signore Silvio Berlusconi de Italia. Berlusconi es un industrial que devino en político, él fundó “Forza de Italia” que aliada con los federales de la Liga Norte y con los neofascistas, ganó las elecciones de 1994. Umberto Eco ha dicho: “Si seguimos como vamos nos convertiremos en un país del Tercer Mundo”. El maestro Eco también ha analizado “la creciente carnavalización de la vida”. Par él se trata del triunfo de una clase que fundamenta sus sendas de seudos valores en una educación falsa impartida por la televisión.

Parece que allá como aquí “la caja de los tontos” ha sabido ganar la partida. ¡Y que aquí no le echen la culpa “al fundador de la T V”, al pobre Petán!.

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