LA HABANA (AFP).- El canciller de Cuba, Felipe Pérez Roque, expresó el repudio de su país a «cualquier tipo de terrorismo» en vísperas del cuarto aniversario de los ataques contra las Torres Gemelas, y evocó el cruento golpe militar en Chile que encabezó el general Augusto Pinochet en 1973.

En declaraciones divulgadas este sábado por la Agencia de Información Nacional (AIN), Pérez Roque fustigó a Washington por su guerra antiterrorista, al señalar que tiene una «doble moral».

«Es el día en que recordamos la muerte terrible de miles de personas inocentes en el ataque a las Torres Gemelas, por lo cual rendimos tributo a su memoria», afirmó.

El canciller señaló que, cuatro años después de los atentados, Washington lanzó una «ilegal guerra contra el pueblo de Irak, utilizando la mentira, con lo que profanó la memoria de las víctimas del 11 de septiembre de 2001».

Fustigó también «la hipocresía de Washington», pues «protege desde hace seis meses» al anticastrista Luis Posada Carriles, un ex agente de la CIA pedido en extradición por Venezuela para juzgarlo por terrorismo.

Posada Carriles, de 77 años, está detenido en Estados Unidos por delitos migratorios, pero Venezuela y Cuba lo responsabilizan del atentado de 1976 contra un avión de Cubana de Aviación en pleno vuelo, que dejó 73 muertos.

Según Pérez Roque, Washington «ampara» al anticastrista mientras permanecen detenidos desde el 12 de septiembre de 1998 cinco cubanos, cuyas condenas -algunas de cadena perpetua- dictadas en 2001 en Miami por cargos de espionaje, fueron revocadas por un tribunal de Atlanta hace un mes.

Cuba acepta que los cinco eran sus agentes, pero niega que realizaran espionaje contra Estados Unidos, sino que vigilaban actividades contra la isla de radicales del exilio cubano en Miami, entre ellos -afirma- Posada Carriles.

«Es propicio recordar la contribución de los cinco luchadores antiterroristas cubanos prisioneros en Estados Unidos por combatir ese flagelo», dijo Pérez Roque.

Asimismo recordó que el 11 de septiembre de 1981 «fue asesinado en las calles de Nueva York el diplomático cubano Félix García por un comando terrorista, integrado, entre otros, por (el anticastrista) Pedro Remón Rodríguez, radicado hoy en Estados Unidos».

También señaló que el golpe que encabezó Pinochet y que desembocó en el suicidio del presidente socialista Salvador Allende en el palacio de La Moneda, fue «organizado por la CIA».

Allende se suicidó con un fusil que le había regalado su amigo, el presidente Fidel Castro, según los testimonios de personas que permanecieron junto a él mientras la sede de gobierno enfrentaba el ataque de los militares alzados.

El 11 de septiembre «es una jornada en la que Cuba ratifica su posición contra el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones», señaló el canciller.