CARACAS, Agencias.- Cuba es uno de los países más favorecidos por Venezuela al recibir 92.000 barriles diarios petróleo con facilidades de pago, casi 50% del consumo de la isla, que ofrece a cambio el apoyo de unos 36.000 profesionales cubanos a los programas sociales venezolanos, la mayoría de los cuales son médicos.

 En el marco del mecanismo Petrocaribe, que celebra su III Cumbre el sábado en Caracas, los dos países construyen un centro de almacenamiento estratégico de combustibles residuales en Matanzas (oeste de la isla), con capacidad de 600.000 barriles diarios, con destino a las operaciones de la estatal venezolana PDVSA en la región del Caribe.

 Además, la refinería y terminal de Cienfuegos (centro) entrará en actividad el próximo 1 de enero, tras concluir un proceso de modernización a cargo de una empresa mixta cubano-venezolana.

 Cuba anunció en mayo pasado que la refinería procesaría unos 65.000 barriles diarios de crudo para las producción de gas licuado, gasolina, diesel, fuel oil y turbocombustible para aviones.

 La refinería fue construida con colaboración soviética en 1991, pero nunca llegó a producir, pues su puesta en prueba coincidió con la crisis económica que se desató en Cuba tras la caída de la Unión Soviética, y fue paralizada de inmediato por ineficiente.

 Cuba y Venezuela también acordaron la construcción de una planta envasadora de lubricantes en la isla, con la empresa de producción de lubricantes Cubalub y el apoyo logístico de PDVSA.

 Otro ambicioso plan comenzó en agosto pasado cuando PDVSA -a través de la Corporación Venezolana del Petróleo (CVP)- y la empresa cubana Cuba Petróleo (Cupet), iniciaron en agosto el primer proyecto de exploración petrolera costas afuera de aguas profundas en la zona económica exclusiva de la isla.

 El proyecto de exploración a riesgo conjunto incluye seis bloques con una extensión aproximada de 10.000 km2, en los cuales se espera confirmar la presencia de yacimientos de crudo liviano en volúmenes capaces de mantener un alto potencial de producción, según PDVSA.

 Durante su más reciente visita a la isla, en junio, el presidente Hugo Chávez propuso comenzar el proyecto de una planta grande de gasificación en Cuba. El combustible podría ser traído a Cuba en barco para su utilización en generacion eléctrica y otros usos, hasta para vehículos.

Uno de los objetivos de II Cumbre de Petrocaribe  será discutir y aprobar la Declaración de Jefes de Estado que se divulgará mañana, en la sesión de clausura de la Cumbre, a la que se espera que asista el presidente venezolano, Hugo Chávez, quien está actualmente en Bolivia.

El objetivo de la cumbre, según las fuentes oficiales, es “profundizar la unión energética regional” de manera que se superen “las asimetrías en el acceso a los recursos energéticos».

Para ello el organismo promueve “un nuevo esquema de intercambio favorable, equitativo y justo entre los países de la región caribeña».

Ese nuevo esquema ha permitido ampliar la infraestructura de almacenaje y distribución de energéticos en las islas caribeñas y, en algunos casos, pagar la factura petrolera venezolana con productos y servicios.

Venezuela envía a los miembros de Petrocaribe unos 200.000 barriles diarios que se pagan a 25 años, con un período de gracia de hasta dos años, y con una financiación venezolana de las facturas petroleras de hasta el 50 por ciento y una tasa de uno por ciento anual, cuando el barril sobrepasa los 40 dólares.

Petrocaribe nació el 29 de junio de 2005, tras el Acuerdo de Cooperación Energética suscrito por catorce países del Caribe durante el I Encuentro Energético de Jefes de Estado o de Gobierno del Caribe, celebrado en Venezuela.

Sus miembros son Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guayana, Jamaica, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam y Venezuela.

Petrocaribe celebró su primera cumbre en junio de 2005 en la ciudad venezolana de Puerto La Cruz y su segunda en la ciudad jamaiquina de Montego Bay, tres meses después.