LA HABANA (AP).- Cuba rechazó categóricamente que le haya cortado la luz y el agua a la Oficina de Intereses de Estados Unidos en esta capital y acusó a la sede de preparar un montaje para agudizar más las ya tensas relaciones entre los dos países.

Un editorial del periódico Granma reaccionó a plana completa en su portada el martes a una serie de denuncias del Departamento de Estado norteamericano sobre irregularidades en los suministros y operaciones de su misión aquí, que sería un preludio del ahondamiento de una crisis diplomática o la evacuación de los funcionarios.

Según el rotativo, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba, el vocero del Departamento de Estado «miente descaradamente’’ pues en ningún momento se les cortó la electricidad o el suministro de agua y en todo caso se vieron afectados por las dificultades en los servicios de toda la zona residencial ocasionada por las condiciones meteorológicas.

«Negamos categóricamente que hayan existido cortes premeditados de la energía eléctrica para entorpecer el funcionamiento de la Oficina de Intereses’’, expresó el rotativo.

Tal como lo reconocieron los propios funcionarios norteamericanos, la misión diplomática siguió trabajando con normalidad e incluso poniendo sus carteles lumínicos con mensajes -muchos de corte antigubernamentales-.