LA HABANA,  (AFP) – Cuba advirtió ayer a la Unión Europea (UE) que debe eliminar todo tipo de condicionamientos y sanciones en su contra para poder normalizar relaciones, y dijo que responderá en breve a la reciente propuesta de «diálogo abierto» hecha por el bloque.

 El canciller Felipe Pérez Roque reclamó la eliminación definitiva de la llamada Posición Común y de la sanciones, al considerar que la invitación al diálogo incluida en el documento aprobado el lunes por los cancilleres de la UE en Luxemburgo es una «rectificación necesaria», pero «no suficiente». 

«Tomamos nota de que la UE ha rectificado su posición anterior de cerrarse al diálogo y de pretender adoptar hacia Cuba una posición de presión y de fuerza», afirmó el ministro en conferencia de prensa. En su propuesta, la UE invitó a Bruselas a una delegación oficial de La Habana para hablar sobre asuntos políticos, de derechos humanos y económicos, entre otros, sobre la base de la «reciprocidad y la no discriminación».  «Han aprendido que no se le puede imponer a Cuba, pero el documento tiene consideraciones que deben ser contestadas oportunamente», destacó el canciller, al señalar que la respuesta será dada en breve.  Sin embargo, Pérez Roque recordó que el bloque no ha eliminado la Posición Común que la UE aprobó en 1996, a instancias del gobierno español de José  Aznar, y la cual exige a la isla cambios en materia política, democrática y de derechos humanos, como condición para recibir ayuda de los 27.