LA HABANA (AFP).- Cuba condenó ayer las medidas anunciadas por México contra La Habana, al disponer el retiro de su embajadora en la isla y la expulsión de dos diplomáticos cubanos, y las calificó de estar «inspiradas en la prepotencia, la soberbia, la necedad y la mentira».

«El ministerio de Relaciones Exteriores rechaza este nuevo acto contra Cuba y anuncia que estas declaraciones inspiradas en la prepotencia, la soberbia, la necedad y la mentira, recibirán oportuna respuesta», advirtió la cancillería cubana en un comunicado.

Esta es la primera reacción oficial de La Habana tras el anuncio de México y Perú de ordenar este domingo el regreso inmediato de sus embajadores en la isla de gobierno comunista, en respuesta a duras críticas efectuadas por el presidente Fidel Castro contra los gobiernos de ambas naciones latinoamericanas.

El comunicado oficial se enfoca en forma exclusiva en la decisión mexicana y no hace alusión alguna a la medida adoptada por el gobierno del presidente peruano Alejandro Toledo, también aludido por Castro en su discurso del Día de los Trabajadores.

Además de convocar a su embajadora de regreso, el gobierno del presidente Vicente Fox intimó a Cuba a retirar a su embajador y al consejero político de la legación diplomática México, por incurrir en «injerencia directa en asuntos internos de competencia exclusiva de los mexicanos», según un anuncio oficial.

«El embajador de Cuba en México, compañero Jorge Bolaños, solo fue informado telefónicamente cinco minutos antes de que estas decisiones se hicieran públicas. Un error más del gobierno mexicano», precisó la cancillería en La Habana.

El texto reseña los anuncios de México en las últimas horas e informa sobre las acusaciones efectuadas contra los funcionarios cubanos José Arbesú Fraga y Pedro Lobaina, quienes según el secretario de Gobernación mexicano, Santiago Creel, realizaron «actividades inaceptables» durante una estadía en ese país.

Fraga es jefe del Area de América del Departamento de Relaciones Internacionales del Comité Central del Partido Comunista y Lobaina es el funcionario a cargo de México en ese departamento.

Según el canciller mexicano, Luis Derbez, ambos funcionarios estaban «buscando cosas que no corresponden» en México.

Fuentes de la Secretaría de Gobernación, bajo anonimato, señalaron a la AFP que los cubanos «hicieron movimientos no diplomáticos que tienen que ver con asuntos domésticos ampliamente señalados en la prensa».

El presidente del Partido de la Revolución Democrática (PRD, izquierda), Leonel Godoy, reconoció a la prensa mexicana que en días pasados, mientras permanecía en «impasse» la situación del empresario Ahumada en Cuba, su formación mantuvo contactos con funcionarios cubanos.