POR JOSE CACERES
Cuba, campeón olímpico del voleibol femenino, le ha enviado una clara señal a sus homólogas de la República Dominicana de que lo sucedido en los pasados Juegos Panamericanos parece fue algo fortuito. Ayer, las cubanas vencieron fácil tres sets por cero (25-23-25-17-25-23) a la República Dominicana, que ya cosecha una victoria y tres fracasos.

Mañana domingo en la madrugada, las pupilas de Jorge Garbey se verán la cara ante Alemania y todas las expectativas están cifradas en ganar ahora ese partido.

Si eso ocurre, entonces las Dominicanas avanzarán a segunda ronda, ya que eliminarían a Alemania y Estados Unidos.

De los grupos A y B, clasificarán los primeros cuarto lugares y bajo ningún concepto, Estados Unidos no puede quedar empate con Dominicana, porque quedaría eliminado por gol average.

El capataz de la República Dominicana, el cubano Jorge Garbey, se mostró contrariado por el revés sufrido ante el combinado de Cuba, que ha minimizado las posibilidades de clasificación de su equipo.

Es la tercera derrota al hilo que le aplica Cuba a las dominicanas en competencias internacionales después de los Panam. La primera fue el torneo NORCECA en octubre pasado, luego en la Copa Panamericana, también el Grand Prix, de Taiwan y ahora en los Juegos Olímpicos.

«La clave ha estado en perder el primer set y en cómo nos hemos desmoronado en el segundo. Pero son cosas de falta de experiencia, de haber jugado muy poca competición de alto nivel. Son jugadoras que han competido poco», indicó.

«Ha habido situaciones puntuales, errores de ese tipo, por ejemplo, de nuestra colocadora -Juana González- por esa falta de aplomo en la pista», dijo el técnico de La Habana, que reconoció el alto nivel demostrado por su adversario.

«Cuba ha jugado muy bien y ha impuesto un ritmo muy alto que nos ha costado seguir. Hay que reconocerlo. Aventuró buenas cosas para el equipo cubano que parece haber encontrado su punto bueno en este torneo», explicó Garbey.

«Estoy algo decepcionado por este partido porque lo hemos luchado. Especialmente en el primer y tercer set. Estoy decepcionado por eso pero no por el torneo porque soy consciente de donde estamos y lo que ya hemos logrado», apuntó el entrenador, que asume las mínimas opciones de clasificación para los cuartos de final.

«Todo pasa por ganar a Alemania el último partido y que Estados Unidos pierda los dos encuentros que todavía le quedan, frente a Rusia y frente a Cuba», agregó el preparador, que calificó al conjunto germano, próximo adversario, como «un bloque muy compacto, que ha crecido mucho en los últimos años y fuerte. Creo que estamos a su altura y que podemos ganar», concluyó.

HABLA MILAGROS CABRAL

La rematadora dominicana Milagros Cabral reconoció que el equipo se encuentra «algo decepcionado» por la derrota encajada contra Cuba, que jugó a un nivel alto «porque sabe que ya podemos ganar y no quiere confianzas».

  «Cuba es un gran equipo y lo ha demostrado. No tienes que centrar el objetivo en parar a una jugadora, porque cualquiera es buena. Tienes que estar pendiente de todas. Además, ellas ya saben que le podemos ganar como ha ocurrido en dos ocasiones recientes, y adoptan más precauciones que antes», indicó.

La máxima anotadora del juego admitió que el duelo «fue difícil, especialmente después de perder el primer set. Intentamos mantener el nivel de juego y lograr una manga para que ellas jugaran presionadas. Pero no lo permitieron», indicó la mejor jugadora dominicana en el torneo.

«Estamos un poco decepcionadas porque después de ganar a Estados Unidos nos habíamos hecho ciertas ilusiones de lograr la clasificación. Por eso era especialmente importante para nosotros la victoria. Ahora todo está mucho más complicado», adujo la jugadora de 25 años.

Milagro Cabral destacó que: «estoy siendo muy feliz aquí e intento aprovechar al máximo todas las vivencias. Intento dar todo en la cancha por mi equipo para compensar esa suerte», concluyó.