SAN JUAN, Puerto Rico
La Comisión Estatal de Elecciones de Puerto Rico informó ayer, martes, que se encuentra en proceso de revisar su contrato con una empresa estadounidense de votación electrónica después de descubrirse cientos de discrepancias en las pasadas primarias de la isla.
El problema se derivó de un defecto de software que hizo que las máquinas, suministradas por Dominion Voting Systems, calcularan erróneamente los totales de votos, indicó Jessika Padilla Rivera, presidenta interina de la comisión.
Aunque nadie ha impugnado los resultados de las primarias del 2 de junio, que identifican correctamente a los ganadores, los totales de votos dados a conocer por las máquinas fueron menores, en algunos de los casos, al total de las papeletas, y algunas máquinas invirtieron ciertos totales o contabilizaron cero votos para algunos candidatos.
“La preocupación es que, evidentemente, nosotros tenemos unas elecciones en noviembre, y nosotros tenemos que darle al país no solamente la certeza de que la máquina expida un resultado correcto, es que ese resultado que se expide es el mismo que se divulga”, dijo Padilla.