Las vitaminas son esenciales para la salud, pero muchos comerciantes del internet han descubierto -inventado- algunas nuevas. Estas son algunas de esas novedades:
Vitamina F: Parece tener varios ácidos grasos insaturados que se encuentran en la mayor parte de los aceites vegetales. Dicen, falsamente, que son una cura para la pérdida del cabello
Vitamina O: Es agua que supuestamente contiene moléculas extra de oxígeno. Se anuncia para curar la angina, anemia, problemas pulmonares, y así por el estilo. La FTC de EEUU la criticó hace algunos años, pero todavía está disponible en internet: no es más que agua salada con burbujas, a US$25 cuatro onzas.
Vitamina P: Son bioflavonoides (pigmentos vegetales) que se venden para tratar calambres en las piernas y estimular la circulación.
Vitamina T: Dicen que fortalece los hematíes (células rojas de la sangre) y que cura la anemia.
Vitamina U: Supuestamente, se encuentra en el jugo de la col, y se vende para aliviar el dolor que causan las úlceras.
Vitaminas del grupo B: Una serie de vitaminas B imaginarias están a la venta, con números que parten de la B-17 y se remontan. Puede que usted haya pensado que B-17 era algún tipo de avión militar, pero también designa al laetrile, un derivado del albaricoque que se puede usar para un falso tratamiento del cáncer.
Vitaminas verdaderas
Para no extendernos demasiado: Usted necesita 13 vitaminas para vivir: A,C,D,E y K, además de las ocho vitaminas B (tiamina o B1, riboflavina o B2, niacina o B3, ácido fólico, ácido pantoténico o B5, biotina, piroxidina o B6, y B12. Todas vienen en los alimentos (y suplementos multivitamínicos); D y K también se producen en el organismo.