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RAMÓN NÚÑEZ RAMÍREZ
Tras pasar satisfactoriamente seis revisiones del Acuerdo Stand By con el Fondo Monetario Internacional (FMI) las autoridades, reiterando su compromiso con el mantenimiento de la estabilidad, han cumplido con suficiente holgura en marzo y en junio de este año con todas las metas del programa, así como las acciones contempladas en el calendario para las reformas fiscal y financiera. El FMI monitorea el desarrollo del programa económico en base a fijar pisos o techos a ciertas variables de estricto cumplimiento, definidas como los criterios cuantitativos de desempeño, y también otras variables, las metas indicativas, cuyo cumplimiento no es estricto pero contribuyen a dar seguimiento al comportamiento de los criterios cuantitativos y a facilitar su cumplimiento.
En cuanto a los criterios cuantitativos de desempeño en el área fiscal, el Sector Público No Financiero (SPNF) presentó un superávit a junio de RD$13,653 millones, superior en RD$6,053 millones al piso del programa, y cuando se excluyen los depósitos correspondientes a Verizon el superávit fue de RD$8,700 millones, lo cual implica un sobre cumplimiento de RD$5,700 millones en relación a la meta de RD$3,000 millones. El gobierno transfirió al Banco Central en el primer semestre la suma de RD$2,945 millones, que supera en $45 millones el piso acumulado del programa de RD$2,900 millones. En los criterios cuantitativos el gobierno no incurrió en atrasos en el pago de la deuda externa y en el pago a los generadores de electricidad. En materia de contratación neta de deuda externa relacionada con proyectos el programa, presentaba a junio un techo acumulativo de US$540 millones; sin embargo la contratación apenas llegó a US$225.6 millones.
La primera de las metas indicativas del área fiscal es el cambio en los préstamos al SPNF del sistema bancario, cuyo techo acumulativo era de RD$1,000 millones, es decir que el gobierno podía incrementar en mil millones (neto de depósitos) el endeudamiento con la banca, sin embargo esa variable fue negativa en RD$8,717 millones, lo cual significa que el gobierno cumple con los compromisos de deuda bancaria, no utiliza el financiamiento y mantiene una elevada posición de depósitos en el Banco de Reservas. En cuanto al gasto primario, el gobierno central (meta indicativa incluida a partir del programa aprobado en febrero de este año) podía ejecutar la suma de RD$97,000 millones al primer semestre, pero efectivamente el gasto primario quedó por debajo ascendiendo a RD$94,900 millones. Las metas indicativas relacionadas con la contratación bruta de deuda externa para proyectos y la contratación bruta de deuda externa apoyada por el presupuesto del sector público alcanzaron respectivamente US$225.6 millones y US$53.1 millones, mientras el programa permitía para cada una de esas variables un techo acumulativo por US$540 millones.
En cuanto a los criterios cuantitativos de desempeño para el área monetaria, los activos internos netos del Banco Central (dinero en circulación menos reservas internacionales netas líquidas) el programa presentaba a junio un techo de RD$6,300 millones, sin embargo dicha variable alcanzó un saldo negativo de RD$12,510 millones. Ese resultado es consecuencia de la importante acumulación de reservas que permite que por cada peso en circulación haya 1.32 pesos en término de reservas netas líquidas. Las Reservas Netas Líquidas (RIN) a junio ascendieron a la cifra histórica de US$1,463.5 millones, superando la meta de US$900 millones e incluso la meta a diciembre de US$1,000 millones.
La única meta indicativa del área monetaria es la base (emisión monetaria más las reservas requeridas a los bancos en certificados de inversión) cuyo techo en el programa era de RD$116,000 millones; sin embargo el cálculo para los últimos diez días del mes arrojó una BM de RD$110,642 millones.
El sector eléctrico es evaluado en el programa en base a la meta indicativa del índice de recuperación de efectivo (CRI) (relación entre la tasa de facturación y la tasa de cobranza de las empresas distribuidoras) cuyo piso promedio en el trimestre debió ser de 61.1%, sin embargo ascendió a 57.8%, incumpliéndose esta meta por 3.3 puntos porcentuales.
Además de las metas fiscales y monetarias, las autoridades también cumplieron con todas las acciones comprendidas en los respectivos cronogramas de las reformas fiscal y financiera, incluyendo la aprobación por parte del Congreso y la promulgación de la Ley de Capitalización del Banco Central y la modificación de la Ley Eléctrica para contemplar la criminalización del fraude eléctrico.
El cumplimiento consecutivo de todas las metas y acciones del programa económico con el FMI, fiel reflejo del compromiso con la estabilidad de las autoridades, ha sido uno de los puntales para la recuperación económica y las altas tasas de crecimiento del producto, para elevar la calificación crediticia del país, mejorar los niveles de confianza y el clima para la inversión , lo cual se ha traducido en mejorías sociales como es la creación de 345,777 nuevos empleos desde agosto del 2004 al mes de abril del 2007 y la reducción de la pobreza extrema, de acuerdo a un estudio del Banco Mundial, de 43.1% en octubre del 2004, a 36% en octubre del pasado año.
