El cura párroco Juan Manuel Mota de Jesús, el «Padre Johnny», aclaró ayer que no huye de nada ni de nadie y que se sorprendió con las acusaciones que le han hecho sobre supuestas violaciones a menores y otros hechos y se puso a la disposición de la justicia.
En un documento de prensa el párraco de la iglesia «Cátedra de San Pedro», de Constanza, aclaró que no estoy escondido, ni huyendo, una vez vi las acusaciones y denuncias, acudí a la capital, a la Procuraduría General de la República, donde la magistrada Marisol Tovar, coordinadora nacional para los Casos de Niños, Niñas, Adolescentes y Familia, encontrándome con la información de que la magistrada está de licencia médica prolongada».
Añadió que también acudió a la fiscalía de Constanza y con la procuradora fiscal de la Jurisdicción de la provincia La Vega, Johanna Reyes, a la que pertenece el municipio de Constanza. Dijo que en vista de que ninguna instancia, ni policial, ni judicial le ha requerido, se puso a disposición de la justicia para que se aclare esta terrible mentira. Calificó de malsanas las acusaciones en su contra, que denigran su ministerio de más de 15 años.