SANTIAGO.  Decenas de familias damnificadas de once comunidades de este municipio marcharon ayer desde el puente de Rafey hasta la gobernación provincial en reclamo de que sean reubicadas.

Los participantes en la marcha, que forman parte de 287  familias  damnificadas de  la tormenta  Olga, expresaron que llevan un año  esperando por la ayuda prometida por el Gobierno,  pero que aún  se encuentran desamparados.

Alvaro Sosa, quien sirvió de vocero del grupo, dijo que 510  familias ya recibieron sus apartamentos, pero que todavía  hay 287  sin techo que han iniciado un  plan de lucha en reclamo de que el gobierno cumpla con lo prometido.

“Ésta es la fecha  en que estas  287 familias viven en  lugares no apropiados, porque lo perdieron  todo cuando la tormenta  y ya desean  que se les entregue un lugar digno donde vivir”, dijo. 

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No los recibieron

Pese a que el grupo se proponía entregar una carta al gobernador, en la que  insisten en sus reclamos, en el palacio de la  gobernación  no fue recibido por ningún funcionario.

Lucrecia Martínez,   una de las afectadas, dijo que “ya estamos cansados de esperar  una respuesta. Queremos que   nos entreguen esos apartamentos para vivir”. Dijo que  no quieren   dinero para el alquiler.