Santiago.- En una muestra de impotencia y desesperación porque el gobierno aún no les entrega las viviendas prometidas, varios damnificados de la tormenta Olga, se encadenaron hoy en el parque Duarte, en frente de la Gobernación Provincial de Santiago.

Iniciaron la protesta a las 7:00 de la mañana, reclamando por sus casas que perdieron a causa de las crecidas del río Yaque del Norte, tras el desagüe de la presa de Tavera, durante el fenómeno de la naturaleza ocurrido en diciembre del año 2007.

Los encadenados residen en las comunidades de Bella Vista y Rafey, dos de los sectores más afectados por las inundaciones que, además de las viviendas cobró la vida de más de 30 de personas.

Junto a ellos se  unieron moradores del barrio San José La Mina, quienes también demandaron de las autoridades la entrega de viviendas luego que fueron desalojadas por los derrumbes.

Juan Pablo Jiménez Moreno, Marianela Sánchez Fortuna, Wellington Nicolás Reyes y Kenia Sánchez, que rodearon con cadenas sus cuerpos, lamentaron que de los más 500 apartamentos que el gobierno donó en La Herradura se beneficiaran personas que no son damnificadas.

“Nadie nos ha hecho caso. Hemos hablado con la directora del Instituto Nacional de la Vivienda (Invi), Alma Fernández y el Gobernador, pero esta gente ignora nuestros reclamos”, expresó

Jiménez Moreno, quien afirmó que estará encadenados hasta que las autoridades busquen donde alojarse.

Sánchez Fortuna,  dijo que las autoridades se quedaron en promesas, mientras las familias que están damnificadas viven “arrimados” o pagando alquileres de casas desde que se produjo ola tormenta Olga, así como desde que algunas familias fueron desalojadas en el barrio San José La Mina.

 “El Gobierno le dio dos y tres apartamentos  a mucha gente que no lo necesitaba, mientras a nosotros nos dejó viviendo en la calle”, manifestó la señora.