Santiago. Decenas de damnificados de la tormenta Olga, ocurrida el 12 de diciembre del año 2007, protagonizaron ayer una protesta frente a la oficina senatorial, para exigir que el Instituto Nacional de la Vivienda (INVI) inicie la construcción del proyecto habitacional que les fue prometido.
Los manifestantes, que paralizaron el tránsito vehicular de la calle El Sol, solicitaron que la directora del INVI, Alma Fernández, ordenar construcción inmediata del proyecto.
Álvaro Sosa, vocero de los damnificados, dijo que se han visto obligados a buscar el apoyo del senador de la provincia, Julio Cesar Valentín, afirmando que los funcionarios competentes se han olvidado de ellos.
Explicó que en esta localidad hay más de 300 familias que quedaron sin hogar tras la tormenta, que afectó al país en 2007, luego de la tormenta Noel.
Sostuvo que la mayoría de afectados sobrepasa los 40 años de edad y no tienen recursos para construir por su propia cuenta una vivienda, por lo que viven en casas prestadas y junto a amigos y familiares, situación que afirman no pueden seguir aguantando.
Si los terrenos están, es necesario que ella construya estas viviendas porque este personal ya no aguanta más, y los terrenos hace tiempo que fueron donados, afirmó Sosa.
El senador Valentín, dijo desconocer de la situación y prometió dar seguimiento al reclamo de los demandantes. Para esto solicitó al vocero de los afectados entregarle un informe con los detalles de lugar.
Los terrenos están
Los damnificados explicaron que los terrenos para la construcción del proyecto habitacional, que beneficiaría a unas 300 familias, fueron donados por la familia Bermúdez hace varios meses y dijeron que están ubicados en la carretera que conduce a La Ciénaga. Explicaron que los terrenos donados tienen una extensión que sobrepasa las cien tareas.