SANTIAGO (AFP).- Tras la ratificación de parte de la Corte Suprema de la orden de arresto ordenada por el juez Juan Guzmán Tapia, el ex dictador chileno Augusto Pinochet aguardaba en su finca costera de «Los Boldos» la notificación judicial que da curso a su aprehensión.

   El tribunal, por un estrecho fallo de tres votos contra dos, rechazó un recurso de amparo presentado por la defensa de Pinochet, para paralizar la orden de arresto que dictó el pasado 13 de diciembre el juez Guzmán Tapia por su responsabilidad en los crímenes de la «Operación Cóndor».

   El magistrado inculpó a Pinochet por su responsabilidad en un asesinato y nueve secuestros atribuidos a ese plan secreto que coordinó en los setenta a las dictaduras del Cono Sur para el exterminio de opositores.

   El ex general, de 89 años, fue autorizado el jueves pasado por su equipo médico a trasladarse hasta su residencia de descanso ubicada en la costa central chilena, en el sector de Bucalemu, 110 km al oeste de Santiago.

   En este lugar, Pinochet esperaba la tarde del jueves ser notificado de la resolución de la Corte Suprema que dio curso a su arresto domiciliario.

   Luego debería llevarse a cabo la filiación o el fichaje de Pinochet, que incluye tomas de fotografías de su rostro y sus huellas digitales, en un trámite que deben cumplir todos los procesados en Chile.  

   La defensa del ex dictador anunció que acatará el arresto, aunque no adelantó la estrategia legal que seguirá para revocar el dictamen de Guzmán Tapia.

   «La orden de detención evidentemente que se va a cumplir», dijo el abogado Pablo Rodríguez, jefe del equipo de juristas que defiende a Pinochet.

   Fuentes judiciales aseguraron, no obstante, que en los próximos días el equipo jurídico que defiende a Pinochet solicitará su libertad condicional y que pedirá su sobreseimiento definitivo en base a su imposibilidad mental de enfrentar un proceso judicial. 

   Los abogados querellantes, por su parte, se encuentran a la espera de los pasos que seguirá la defensa del ex dictador, aunque se muestran confiados en que finalmente Pinochet será condenado.

   La residencia de descanso de Los Boldos es una de las cerca de 11 propiedades que poseen en Chile el general Pinochet y su esposa.

   La amplia finca, según fuentes de su entorno, es lugar favorito del ex dictador para pasar el verano austral.

   En este lugar, Pinochet ya cumplió una vez un arresto de seis semanas, entre enero y marzo de 2001, que decretó el mismo juez Guzmán Tapia por las 75 ejecuciones atribuidas a la «Caravana de la muerte».

   Ese primer juicio abierto en Chile quedó, sin embargo, archivado en septiembre de 2002, después de que la Corte Suprema sobreseyera a Pinochet al considerar que una demencia moderada le impedía defenderse ante los tribunales.