Hoy 
Washington (EFE).- La Organización de Estados Americanos (OEA) ha dado un voto de confianza a su secretario general, Miguel Angel Rodríguez, acusado de corrupción en Costa Rica, mientras sigue el desarrollo de los acontecimientos, según varios embajadores.
El representante de Panamá ante la OEA y nuevo presidente del Consejo Permanente desde el 1 de octubre, Arístides Royo, declaró a EFE que Rodríguez ha conversado con todos los grupos regionales de la entidad y que «todos le dieron un voto de confianza».
Royo señaló que «la tónica general ha sido que todavía no hay un proceso en Costa Rica que haya sindicado al secretario general» por actos de presunta corrupción.
Añadió que «el sentimiento general de la OEA es esperar los acontecimientos, teniendo en consideración que la acusación individual de una persona no es causa suficiente para que el secretario general abandone su puesto».
«En ese sentido, se le ha dado respaldo y un voto de confianza para que permanezca en su puesto», precisó el ex presidente panameño.
«Tenemos que ver la evolución de los acontecimientos porque puede haber una acusación contra un hombre inocente», manifestó.
Royo dijo que «con lo que se ha presentado hasta el momento», a los 34 países de la OEA «no les parece suficiente» motivo para que el secretario general «abandone su puesto».
Agregó que Rodríguez afirmó a los representantes de esas naciones en la OEA «que se va a defender ante la justicia costarricense».
«Ignoro qué es lo que va a hacer», resaltó Royo tras explicar que Rodríguez puede ir a Costa Rica a defenderse o dar un poder a sus abogados «y seguir estando en Washington o en sus misiones oficiales sin necesidad de ir a su país».
En todo caso, y si las acusaciones contra Rodríguez se presentan ante los tribunales costarricenses, el Consejo Permanente de la OEA tiene la potestad de adoptar las decisiones pertinentes, según dijo hoy a EFE el secretario general adjunto, Luigi Einaudi.
Einaudi indicó que «la OEA no puede basarse en cuestiones (informaciones) de prensa meramente» para decidir la suerte del ex mandatario costarricense, al que uno de sus ex colaboradores señala como el receptor del 60 por ciento de unas comisiones millonarias de la empresa francesa Alcatel a cambio de un contrato.
El «número dos» del Foro Regional manifestó que «hasta hoy no hay acusaciones formales del Poder Judicial de Costa Rica contra Rodríguez».
Einaudi destacó que «la situación (de presunta corrupción) existe» y que se va a discutir, pero dejó claro que no le corresponde a él pronunciarse porque «a fin de cuentas, el pronunciarse es una cuestión que depende, según la Carta de la OEA, de la Asamblea General y del Consejo Permanente».
Explicó que el caso de Rodríguez no figuraba en la agenda de la sesión ordinaria que celebró hoy el Consejo Permanente «porque nadie ha pedido que esté».
El secretario general adjunto consideró que por el momento las acusaciones contra el nuevo directivo de la organización «son una discusión interna (de Costa Rica), mientras nosotros tratamos de avanzar normalmente en medio de un período difícil para la OEA por razones que no tienen nada que ver con lo planteado en perjuicio de Rodríguez».
Einaudi indicó que, en caso de una eventual renuncia de Rodríguez, él no asumiría automáticamente la Secretaría General y que la Asamblea General sería la que adoptaría los pasos a seguir.
Mientras tanto, la canciller de Paraguay, Leila Rachid, que aspira al cargo que ocupa Einaudi y que hoy pronunció un discurso ante el Consejo Permanente, opinó en una rueda de prensa que, en el caso de Rodríguez, su país «respeta absolutamente la soberanía judicial de cada nación».
Rachid destacó que «he venido con el mensaje de preservar la institucionalidad de la OEA y dejar que la justicia actúe. El propio secretario general ha dicho claramente de que él actuará conforme a la justicia de su país».
La canciller paraguaya recalcó que este escándalo «ni incide para nada» en la lucha de la OEA contra la corrupción».
