El presidente Danilo Medina alertó ayer a sus homólogos de Iberoamérica que no se puede permitir que 20 millones de jóvenes que ni estudian ni trabajan, conocidos como “ninis”, sean parte de una generación perdida para el continente al que pertenecen.
“No podemos permitir que estos 20 millones de jóvenes sean una generación perdida para nuestro continente”, precisó el mandatario dominicano al pronunciar un discurso en la XXV Cumbre Iberoamericana que concluyó ayer en Cartagena de Indias, Colombia.
En tal sentido, el presidente Medina proclamó el compromiso de transformar el futuro de los jóvenes y llamó a los jefes de Estado de Iberoamérica a trabajar juntos para cambiar a una generación de “ninis” en “sisis”.
“Estamos decididos a sumarnos a programas e iniciativas orientadas a transformar el futuro de nuestros jóvenes”, precisó.
Medina habló en torno a un reciente informe del Banco Mundial que revela que en América Latina más de 20 millones de jóvenes ni estudian ni trabajan, conocidos como “ninis”.
Recordó, además, que la mayoría de esos jóvenes provienen de hogares pobres o vulnerables, contrario a los “sisis”, que estudian y trabajan.
Dijo estar decidido a sumarse a programas e iniciativas orientadas a transformar el futuro de los jóvenes. Medina entiende que se debe asegurar a los jóvenes formación, empleo, crecimiento y oportunidades de expansión de sus horizontes.
Expresó, además, que le llenaba de optimismo que Iberoamérica “ponga a los jóvenes en primer plano, lo cual demuestra que trabajando juntos podemos transformar a una generación de ninis en una generación de sisis”.
El mandatario dominicano aprovechó el escenario para reafirmar que la República Dominicana apoya con entusiasmo el objetivo de la Alianza por la Movilidad Académica. Precisó que dicha iniciativa consiste en facilitar la movilidad a 200,000 estudiantes de toda la región en un periodo de cinco años. Dijo que el intercambio enriquecerá la calidad de los sistemas educativos iberoamericanos.
Además, indicó, mejorará la competitividad del capital humano. Afirmó que para el pueblo dominicano será un placer y un honor acoger a estos jóvenes y “enviar a los nuestros a mejorar su formación en los países hermanos”. Reiteró que los gobernantes de la región tienen una inminente responsabilidad para evitar que decenas de millones de jóvenes que salieron de la pobreza vuelvan a ella.
En tal sentido, sostuvo que si se logra desarrollar esa demanda interna “estamos mirando a un potencial mercado de 625 millones de consumidores”.
Apoyado en esos datos, el gobernante abogó por priorizar el fortalecimiento de los bloques comerciales entre las naciones iberoamericanas. Dijo que esa realidad es algo que los pueblos que representan los mandatarios presentes en la cumbre les están pidiendo.
Sustentó su afirmación en el último estudio del Latinobarómetro, que indica que el 77% de los latinoamericanos favorece una mayor integración económica, mientras que el 60% aprueba una mayor integración política.
“Debemos multiplicar los contactos, intercambios y encadenamientos productivos”, afirmó.
A su juicio, esa situación permitirá convertir la región en un bloque dinámico y poderoso, mediante la creación de decenas de millones de empleos que se requieren. Abogó, además, por que se complementen las capacidades en infraestructuras, equipamientos y recursos humanos, así como en fomentar la circulación del conocimiento y la cultura digital..