POR PEDRO GERMOSEN
El precandidato presidencial peledeísta Danilo Medina propuso ayer un acuerdo entre el gobierno, la oposición, el empresariado y la sociedad civil para enfrentar el principal reto, que identificó como el problema de mercado, porque, según expuso, para que un pueblo se desarrolle tiene que tener ciudadanos con capacidad de compra.

Yo quiero trabajar por un modelo de desarrollo con equidad social, dijo Medina para advertir a seguidas que para ejecutar el programa de desarrollo que propone para un período de 12 años, la reelección presidencial tiene que ser quitada del camino.

Expresó que los dominicanos no tienen capacidad de compra porque la mitad de la población es pobre, un tercio vive en la marginalidad y añadió que los organismos internacionales revelan que el 27% de los habitantes de aquí pasa hambre. Calculó que esa proporción equivale a dos millones y medio de personas.

Entonces, el reto que tenemos en la República Dominicana es como hacer que nuestra gente pueda integrarse al mercado de demanda de bienes y servicios, dijo Medina durante el almuerzo que le ofrecieron los medios de comunicación del Grupo Corripio.

Manifestó que para superar esta situación hay que hacer un pacto con los partidos políticos de oposición, con la sociedad civil y con el empresariado junto al gobierno, para que todos podamos establecer los ejes fundamentales que el país tiene para desarrollarse y poder crear los empleos que necesita la sociedad.

Dijo que el programa que respalda favorece las inversiones en turismo, agropecuaria, manufactura, incluyendo zona franca y, de manera muy especial, el desarrollo de las micro, pequeñas y medianas empresas.

De esa manera los excluidos de la sociedad podrán tener capacidad de compra para así ensanchar el mercado de bienes y servicios, afirmó.

Señaló que al efecto habría que realizar una transformación que abarca el sistema educativo, ya que, según las estadísticas de organismos internacionales, ese sector debe ser transformado.

Medina recordó que el Foro Económico Mundial evaluó el sistema educativo, es de decir, la calidad de la enseñanza y de las escuelas, de 115 países, y los resultados para nosotros fueron terribles, como para uno sentir vergüenza de lo que está ocurriendo en ese sector, ya que el país quedó en último lugar.

Dijo que según un estudio hecho aquí recientemente, el nivel de aprendizaje de los bachilleres que ingresan a las universidades es del sexto grado.

Entonces, si tú quieres hablar de desarrollo y de progreso y dar un salto tecnológico tú tienes que atender ese problema. Ése es un bache que tenemos. Tú tienes que establecer un nuevo modelo de enseñanza en la República Dominicana, expresó Medina.

Dijo que junto a un equipo de técnicos ha delineado un modelo orientado a cambiar el sistema en un plazo de 12 años, para tener un nuevo tipo de bachilleres empezando por el pre-primario.

Razonó que el desarrollo de este modelo abarcaría tres períodos de gobierno, para lo cual, insistió, debe pactarse y si se requiere una ley buscar el consenso para que el Congreso Nacional la apruebe.

De esta manera, al gobierno que le corresponda el período 2008-2012 iniciaría por el pre primario y primero de la primaria y terminar con el cuarto grado, y el siguiente período que integre el quinto, sexto, séptimo y octavo y, en el tercer período gubernamental abarcar los cuatro años del bachillerato.

Concomitantemente, hay que ir instalando institutos técnico-vocacionales en los que se enseñe tecnología de punta y, finalmente, abrir una universidad que practique la excelencia académica, para graduar a los doctores y científicos que ayuden a dar el salto, porque sin capital humano es imposible usted hablar de desarrollo.

57,000 AULAS

Resaltó que el programa que esboza es muy ambicioso, puesto que implica la construcción de 57 mil aulas, por lo que no se puede hacer en menos de un período de 12 años.

Se quejó de que en la República Dominicana no hay ningún tipo de inversión en capital humano.

Expresó que hay que hacer esas inversiones en educación y salud para tener ciudadanos capacitados y saludables.

Medina dijo que en el modelo que plantea habría que enseñar en aulas de 30 alumnos y horario de ocho horas, con maestros capacitados y bien pagados, pero supervisados y vigilados.

Asimismo, dijo, en la medida de lo posible, descentralizar las escuelas públicas.

Al efecto, explicó, asignaría un papel privilegiado a las asociaciones de colegios privados y de padres y amigos de la escuela para que ayuden a dirigir los centros educativos.

Manifestó que la descentralización del sistema educativo ya se verifica en México, Nicaragua y El Salvador y, resaltó, Chile pasó a los municipios la construcción de las escuelas.

Indicó que asimismo deben designarse equipos especializados para supervisar la enseñanza extracurricular, de tal manera que los niños reciban ocho horas de docencia y no dos horas y medio como ahora, para tener un nuevo tipo de bachilleres.

El licenciado Medina insistió en que sólo así se puede pensar en desarrollo.

Solamente los países que se han quitado el pan de la boca para invertir en educación han podido dar el salto de pasar del subdesarrollo al desarrollo, y si nosotros no hacemos eso, nos quedaremos en los discursos muy bonitos, muy floridos y en ideas muy floridas pero impracticables, significó Medina. Advirtió que nadie invierte en un país donde los recursos humanos no están capacitados.

Expresó que el desarrollo llegará a largo plazo, pero lamentó que los presidentes siempre estén pensando en reelegirse, y como están pensando en reelegirse estas inversiones, que no se ven, en el corto plazo no se hacen.